El PP e IU pactan para dejar al PSOE sin su emblema de Alcalá

El Partido Popular (PP) e Izquierda Unida (IU) han cerrado ya el acuerdo de gobierno que arrebatará al PSOE la Alcaldía de Alcalá de los Gazules, sin duda uno de los principales emblemas de los socialistas en la provincia de Cádiz. El pacto contempla que el nuevo regidor alcalaíno será desde mañana Julio Toscano, del PP.

La decisión de pactar con el Partido Popular ha sido comunicada ya por el cabeza de lista de IU en Alcalá, Juan Carlos Fernández Luna, a la dirección provincial de su partido que lidera Manuel Cárdenas. Así, los tres concejales izquierdistas darán sus votos mañana al alcaldable del PP, vulnerando las órdenes marcadas por la dirección izquierdista, que desde que se celebraron las elecciones municipales ha venido repitiendo que sus ediles electos tienen prohibido votar a un alcalde del PP y pactar con este partido.

De esta manera, los tres concejales de IU en Alcalá pueden ser objeto de la apertura de un expediente sancionador por parte de la dirección provincial de su partido que, incluso, podría desembocar en su expulsión, según confirmó ayer Fernando Macías, coordinador de Política Institucional de la ejecutiva provincial de IU y que mañana se convertirá en el nuevo alcalde de Medina Sidonia. Macías considera que estos ediles "han pasado los límites de los estatutos de IU".

Pese al mutismo existente sobre este pacto, este periódico ha podido conocer que Julio Toscano será el alcalde y que Juan Carlos Fernández Luna se convertirá en el primer teniente de alcalde. La novedad es que ninguno de los dos cobrará del Ayuntamiento, ya que el primero continuará con su profesión de médico y el segundo mantendrá su plaza de profesor. Quienes sí serán liberados por el Consistorio serán dos de los concejales electos del PP (Susana María Ruiz y Estela Sánchez) y los otros dos de IU (Antonio Jiménez y Zulema Sánchez).

Si efectivamente mañana se cristaliza este pacto y Julio Toscano se convierte en el nuevo alcalde, el PSOE perderá uno de sus principales bastiones de la provincia, ya que de Alcalá de los Gazules provienen dirigentes socialistas de prestigio como Luis Pizarro, Alfonso Perales (ya fallecido), Bibiana Aído, José Luis Blanco, Gabriel Almagro o Daniel Vázquez, entre muchos otros. Desde 1979 el PSOE siempre ha estado al frente de la Alcaldía alcalaína, por la que han pasado Francisco Aído, Miguel del Río, Luis Romero y Arsenio Cordero, que hoy abandonará la Alcaldía en la que ha permanecido ocho años para incorporarse el lunes a su plaza de profesor.

El PSOE perdió por primera vez la mayoría absoluta en Alcalá en 2003. En aquella ocasión, el PP y el grupo independiente VIDA -creado por escindidos del PSOE- ya ofrecieron la Alcaldía a IU, que entonces era la segunda fuerza. Sin embargo, y tras una larga reflexión, los ediles izquierdistas ya liderados por Fernández Luna optaron por quedarse en la oposición, permitiendo un gobierno en minoría de Cordero que cuatro años después recuperaba la mayoría absoluta para el PSOE.

Tanto en 2003 como en 2007 Izquierda Unida y el PSOE tenían en vigor un acuerdo marco en Andalucía que impedía la agresión entre ambas fuerzas. La no reedición de ese acuerdo tras las elecciones del 22-M ha podido ser uno de los elementos que ha llevado a los ediles de IU en Alcalá a pactar, ahora sí, con el PP.

Aunque durante todo el día ayer se especulaba con que este pacto entre el PP e IU se podría repetir en Grazalema, esta opción fue descartada anoche por los ediles de IU en esta población serrana, donde la alcaldesa en funciones, María José Lara (PSOE), seguirá gobernando, aunque a partir de ahora en minoría.

Desde el PP y desde el PA se había propuesto a IU constituir un gobierno tripartito que desbancaría de la Alcaldía al PSOE, que gobierna en Grazalema desde 1979. El cabeza de lista del PP y ex diputado provincial, Salvador Ramírez, había solicitado la Alcaldía aduciendo que la suya es la segunda fuerza de la localidad, que él es el único de los ediles electos de estos tres partidos con experiencia municipal y que la alcaldesa en funciones está imputada por cinco supuestos delitos urbanísticos. Tras varias reuniones, IU anunciaba anoche que sus ediles se votarán a sí mismos, con lo que el PSOE gobernará en minoría.