Pesimismo y malos augurios del sector ante la Directiva de Productos del Tabaco
Casi el cien por cien de los estanqueros andaluces (97,2%) considera que la Directiva de Productos del Tabaco traerá consigo un incremento del contrabando de tabaco; un 96,8% estima que facilitará la falsificación de los envases; y un 96% opina que causará un descenso de la recaudación fiscal. Estos porcentajes son los que arroja el estudio de la Mesa del Tabaco con respecto a esta norma europea "que deja indefensos a los estanqueros", señala su portavoz, Juan Páramo.
Entre otros aspectos, la futura norma -que se aprobará el próximo mes de enero- prevé prohibir el uso de aromas como chocolate, fresa o mentolado, agrandar hasta un 65% la talla de las advertencias sanitarias de las cajetillas y evitar en los envases ciertos términos como "con bajo contenido de alquitrán" o "sin aditivos" que pueden hacer pensar que unos son menos dañinos que otros. La directiva se marca también como objetivos establecer medidas más estrictas contra la falsificación y el contrabando e imponer sanciones más duras.
Nada más lejos para la realidad según la Mesa del Tabaco. Sus socios entienden que con esta homogeneización del producto el comercio ilícito se incrementará notablemente así como las imitaciones fraudulentas. El tabaco de venta legal será mucho menos atractivo por la estandarización de las cajetillas y ofrecerá una menor variedad de elección al fumador adulto. Así pues, esto traerá consigo una devaluación del sector y de las marcas.
"Si yo fumo mentolado y no me dan una justificación científica de por qué lo prohiben, iré al mercado negro a buscarlo", señala el portavoz de la Mesa del Tabaco. "Según un informe de la consultora independiente Analistas Financieros Internacionales (AFI), la directiva europea hará que se dispare el contrabando hasta cifras del 23% en el territorio nacional, lo que supondría una pérdida de 1.700 millones de recaudación fiscal", concluyó.