Revisión óptica VS fracaso escolar

El colegio de ópticos cree "insuficientes" las revisiones oculares en las escuelas Advierte que con un mayor control de su vista, uno de cada tres alumnos gaditanos podría mejorar sus notas

Los niños en edad escolar requieren una mayor vigilancia de sus problemas oculares.
Los niños en edad escolar requieren una mayor vigilancia de sus problemas oculares.
Redacción Cádiz

18 de octubre 2013 - 05:01

El Colegio Oficial de Ópticos-Optometristas de Andalucía (COOOA) advierte que más del 30% de los alumnos gaditanos de Educación Primaria presentan deficiencias en su salud visual que pueden repercutir negativamente en sus resultados académicos. Sin una adecuada revisión, los escolares que comienzan el nuevo curso lectivo pueden presentar cefaleas, escozor, dolor ocular o mostrar comportamientos como acercarse demasiado a los libros de texto o monitores de ordenador, síntomas indicativos de dificultades visuales y que deberían ser evaluadas y tratadas.

Con el objetivo de disminuir estos problemas, la entidad colegial insiste en que los exámenes que se desarrollan en ciertos centros escolares son insuficientes, puesto que solo analizan un 5% de los problemas visuales que están asociados a los alumnos comprendidos en edades primarias. En la mayoría de los casos, estas pruebas se limitan a comprobar la agudeza visual del alumno en visión lejana, sin realizar estudios que evalúen su rendimiento en actividades que precisen una visión cercana. Según Francisco Fernández, delegado del Colegio Oficial de Ópticos-Optometristas de Andalucía en Cádiz: "Que un alumno presente una agudeza visual adecuada no significa necesariamente que posea una buena visión. Además de ello, hay que tener presente que intervienen otras variables, como la binocularidad, la motilidad ocular o la acomodación, entre otras características".

El COOOA también insiste en ampliar la frecuencia de realización de estos reconocimientos, obligatorios hasta la finalización de Primaria. En este sentido, se propone su implantación en toda la etapa de escolarización y no solo en Primaria, además de realizar un primer examen al comienzo del curso y otro en las fases de mayor esfuerzo ocular, como el segundo y tercer trimestre, cuando es más probable la aparición de un problema de visión binocular en el estudiante. Por su parte, la entidad colegial anima a los padres a que acompañen a sus hijos a revisiones con el óptico-optometrista, para complementar el servicio realizado por los centros escolares.

Con una evaluación más pormenorizada, tanto las anomalías visuales refractivas (miopía, hipermetropía o astigmatismo) como los problemas de visión binocular (fijación, acomodación, vergencias o movimientos oculares), podrían detectarse a tiempo y ser tratadas mediante terapia visual, gafas o lentes de contacto, con la consiguiente mejora del rendimiento de los alumnos durante el curso escolar.

El COOOA considera primordial la figura de los educadores en cuanto a la detección de indicios que evoquen alguno de los síntomas, ya que se trata de una etapa de desarrollo de la visión que puede marcar la salud visual del niño en el futuro. Según Fernández, "los profesores deben observar la conducta de los alumnos y poner en conocimiento de los padres cualquier anomalía que pudieran detectar, con el fin de corregir el trastorno visual a tiempo". Además, "los padres deben complementar este estudio en casa, limitando las horas de utilización de dispositivos tecnológicos como consolas, ordenadores o tabletas, ya que un uso incontrolado de estos dispositivos podría agravar las deficiencias visuales del alumno".

Lo último

stats