Galería del crimen | Capítulo 22
Por el honor de nuestra vecina
Supersol mantendrá abierto el supermercado de la avenida del Perú de Cádiz y el local de la calle Real de San Fernando cuya clausura estaba previsto en el ERE que está negociando los sindicatos "siempre y cuando haya acuerdo entre las partes". La dirección también ha planteado reducir el número de despidos de los 404 planteados inicialmente a 294, según un comunicado emitido por los representantes de los trabajadores.
De los 21 cierres previstos al comienzo de la reestructuración, la compañía mantiene 18, ya que ha decidido salvar al local de Moralzarzal. En el caso de la provincia de Cádiz, serán siete los supermercados que echarán el cierre. Tres de ellos se encuentran en Jerez, entre los que se encuentra el emblemático local de Merca 80, y el resto se localizan en Rota, Puerto Real, Sanlúcar y Algeciras.
Ambas partes han mantenido esta martes una nueva reunión dentro de la ronda de negociaciones del Expediente de Regulación de Empleo que la compañía presentó a principios de abril. El encuentro acabó sin acuerdo ya que aún no hay consenso sobre las indemnizaciones pese a que se han acercado posturas.
La empresa ofrece una indemnización por despido de 27 días por año trabajado hasta un máximo de 16 mensualidades. UGT y CCOO reclaman 30 días por año trabajado hasta 22 mensualidades mientras que CGT mantiene la petición de 31 dias por año trabajado y 24 mensualidades. Cabe recordar que el mínimo que marca la legislación laboral asciende a 20 días por año trabajado y doce mensualidades.
La cadena de supermercados ha dado de plazo hasta el próximo 4 de mayo para que los empleados que deseen abandonar la compañía de forma voluntaria lo comuniquen a la dirección. Por su parte, los sindicatos tienen previsto realizar asambleas en las diferentes provincias para informar del desarrollo de la negociación.
Supersol pertenece al grupo lituano Maxima desde 2012, cuando adquirió a Dinosol su participación. Desde entonces, ha inyectado hasta 150 millones de euros para reflotar el supermercado, buscando dar dar un giro a su negocio y entrar en competencia con las distribuidoras de los descuentos al estilo de Lidl. Sin embargo, la matriz no ha logrado equilibrar las cuentas y lleva años en números rojos.
La compañía decidió presentar el ERE después de cerrrar 2018 con nueve millones de euros en pérdidas.
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