"Se tuvo que apostar por el mercado de cruceros en los 90"

El presidente de Navantia se detuvo especialmente en la situación del astillero de la capital gaditana y su futuro-

-En el mercado de Reparaciones, parece que el astillero de Cádiz tiene asegurada su tranquilidad. En Cádiz habló de dar el paso de la reparación al mantenimiento. ¿Por qué es mejor esa opción?

-Navantia está realizando una apuesta por el apoyo al ciclo de vida. Frente a una reparación convencional, el apoyo al ciclo de vida garantiza que el buque va a estar plenamente operativo durante su vida operativa, sin pérdidas de capacidad por el paso del tiempo, manteniendo sus prestaciones o incluso incrementándolas al ir incorporando las nuevas tecnologías que vayan apareciendo. Este apoyo al ciclo de vida es una línea de actividad que consideramos clave para el futuro de Navantia. Ahora, esta nueva concepción de la actividad de mantenimiento exige que toda la organización esté volcada en el concepto, a la vez que tiene grandes ventajas para el cliente lo que conllevará una mayor fidelización y por lo tanto una carga de trabajo más estable a lo largo del tiempo.

-En este sentido, ¿da por perdida para 2011 la entrada en el dique del Príncipe de Asturias?

-En absoluto. A mí por principio no me gusta dar por perdida de antemano ninguna cuestión y por supuesto seguiremos de cerca este asunto. Eso sí, es un tema que compete básicamente a la Armada y hay que ser conscientes de la situación presupuestaria por la que atraviesa el país y en concreto la Marina española, que hace complicado su encaje en el año 2011.

-¿Navantia nunca se ha planteado el mercado de cruceros, para su reparación o incluso construcción?

-La decisión de entrar en el mercado de diseño y construcción de cruceros habría que haberla tomado a finales de los 90 y las circunstancias de entonces imagino que no lo aconsejaron. En estos momentos, el mercado de los cruceros, con una gran concentración en pocos astilleros, también ha ido decreciendo, habiéndose cancelado contratos en vigor para la construcción de este tipo de buques. Ahora bien, dada nuestra cercanía al Puerto de Cádiz, sí estamos reparando cruceros y estamos abriendo negociaciones para que, aquellos cruceros que recalen en Cádiz o la incluyan en sus rutas, puedan utilizar nuestras instalaciones. Hemos reparado buques de Iberocruceros, empresa con la que estamos en magníficas relaciones y a la que vamos a seguir reparando barcos.

-Aprovechando la cercanía del Bicentenario de 1812. ¿Navantia se plantea revitalizar su zona histórica de alguna forma?

-Navantia siempre ha sido fiel a la idea de que el patrimonio histórico de la empresa debía estar a disposición de la ciudadanía y, de hecho, tenemos museos en nuestros astilleros que son visitados por todo aquel que lo desea. Tenemos una importante zona histórica como la de Matagorda, que se cuida con esmero y tiene un museo de primer nivel. Ha estado, está y estará abierta a los visitantes que la deseen conocer y por supuesto que está a disposición de las autoridades y del Bicentenario. En este sentido tenemos la intención de hacer una nueva contribución mediante la restauración en el Arsenal de La Carraca de la celda del Capitán Miranda, uno de los destacados personajes del movimiento libertador de Sudamérica.

-Por último, teniendo en cuenta la situación de los astilleros de Huelva y Sevilla, ¿está Navantia en condiciones de recuperarlos?

-En estos momentos estamos concentrados en trabajar duro para consolidar un proyecto industrial estable y de futuro para el perímetro productivo actual, lo que no es una tarea fácil. Ese es nuestro reto y nuestra prioridad en estos momentos. Pensar en introducir nuevas variables o incrementar las capacidades productivas supondría un serio riesgo para el conjunto de este proyecto.