Un respiro para los bolsillos más débiles

Cádiz/Cómo conciliar la situación de precariedad de la totalidad de los ayuntamientos con la imperiosa necesidad de generar ingresos, con el agravante de que muchos de ellos están sometidos a estrictos planes de ajuste controlados directamente por el Ministerio de Hacienda. Y todo ello con la premisa municipal de no hacerlo repercutir sobre los ciudadanos. Pues a juzgar por el informe sobre tributos locales presentado ayer por la Confederación de Empresarios de Cádiz (CEC), en este año que está a punto de finalizar los ayuntamientos han optado por la última opción, es decir, no aumentar los impuestos a sus vecinos, como norma general.

Salvo casos puntuales, los 44 ayuntamientos gaditanos han decidido en 2016 no variar lo que cada ciudadano paga por el IBI, el IAE el impuesto de vehículos o las distintas tasas, como la de basura (comercial) o la licencia de obras. El informe de los empresarios está considerado como una auténtica referencia para evaluar el comportamiento municipal en el cobro de impuestos.

Este año (ya van 20), la CEC analiza el comportamiento de ocho impuestos: el de Actividades Económicas (IAE); el Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI), tanto urbano como rústico; el Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM) de turismos y camiones; el impuesto de construcciones, instalaciones y obras ; la tasa por recogida de basura; la tasa por con motivo del inicio de actividad económica y licencias de aperturas; la licencia urbanística; y los vados.

Con respecto al IBI urbano, el documento refleja que este ejercicio han modificado sus tipos impositivos un total de 19 municipios. De ellos, 13 han sido levemente al alza: Algeciras, Castellar, Conil, El Bosque, El Gastor, Grazalema, Jimena, Puerto Real, San Roque, Setenil, Torre Alháquime, Vejer y Zahara. A la baja han modificado sus tipos un total de 6 municipios: Cádiz, La Línea, El Puerto, Rota, San Fernando y Sanlúcar. Pero, además, incluye una escala con las localidades donde la cuota íntegra media por cada unidad urbana (lo que se paga al año por cada vivienda, de media).

Según esos datos, El Puerto es el municipio más caro (tabla anexa) y Espera, la más barata. Sin embargo, también llama la atención que, entre el pasado año y este 2016, el municipio gaditano que más ha incrementado este impuesto ha sido Bornos, con 49,05 euros más de un año a otro. Le siguen Los Barrios, Arcos, San Roque y Puerto Serrano (todos con diferencias que van de los 43 a los 30 euros por cuota urbana más al año). En el lado contrario, los que más la han reducido han sido Olvera, con una rebaja de 64,5 euros; y Prado del Rey, con 61 euros menos que en 2015.

Uno de los aspectos que incluye este informe (que puede consultarse en la web de la CEC y también en la de Diario de Cádiz) es la posibilidad de comprobar la repercusión de los distintos impuestos con ejemplos. El primer de ellos propone compara cuánto IBI pagaría un oficina de 100 metros cuadrados en las calles principales de las ciudades más pobladas de la provincia. Así, en Jerez saldría por 650,94 euros, la más cara de todas, pero no supondría aumento con respecto a 2015. Le seguiría una oficina en Sanlúcar, con 603,86 euros, y además supone un aumento anual de 13,85 euros. En tercer lugar, la capital gaditana, con 593,99 euros, y un incremento sobre el año pasado de 2,57 euros. Después irían La Línea, San Fernando y El Puerto (con 536, 522 y 504 euros, respectivamente, pero sin aumento sobre el ejercicio pasado). Por último, Algeciras, con 404,20 euros, sería la única de las ocho grandes poblaciones gaditanas que aplicaría una rebaja en este impuesto, exactamente, de 17,77 euros menos que en 2015. La más barata de las ocho sería Chiclana, con 308,49, igual que en 2015.

También incluyen los empresarios en su informe el Impuesto sobre Actividades Económicas (IAE). Aquí hay que incidir en que se rige por un coeficiente que se aplica en función de distintos parámetros, lo que hace que sea igual en muchos municipios. No obstante, la CEC destaca como novedad al respecto que, por primera vez, aplicará este impuesto el Ayuntamiento de Bornos, por el polígono industrial de Cantarranas.

A continuación se detiene el informe de los empresarios en el caso del IBI rústico, indicando que en 2016 se modificaron al alza los tipos impositivos en los municipios de Grazalema, San Roque y Torre Alháquime, mientras que lo hicieron a la baja en Setenil. Para el impuesto sobre los Bienes Inmuebles de Características Especiales, los municipios de El Puerto y Sanlúcar también modificaron este año a la baja sus tipos impositivos.

Otro impuesto que afecta a la práctica totalidad de los ciudadanos es el que se paga por los vehículos. El IVTM para turismos en 2016, según los empresarios, refleja que son tres los municipios que lo suben: Los Barrios (con 27,33 euros más); Arcos (algo más de 20 euros); y Conil (7,17 euros más). El resto mantiene las tasas de 2015. Para los camiones (más de 9.999 kilos), únicamente son los municipios de Conil y Los Barrios los que modifican la cuota de este impuesto al alza.

Por último, la Confederación de Empresarios analiza la evolución este año, en comparación con 2015, de las tasas de aplicación municipal, esto es, recogida de basura, tramitación de licencias urbanísticas, inicio de actividad económica y vados.

Para la primera de ellas, los empresarios no van a lo que se cobra al ciudadano en el recibo, sino a dos supuestos prácticos que le tocan de lleno. En primer lugar, la tasa que tendría que pagar un restaurante de dos tenedores con cinco empleados, situado en calle de primera categoría, cuya superficie es de 100 metros cuadrados y cuenta con una capacidad aproximada de 50 plazas. Para este supuesto práctico, en el año 2016 han subido este impuestos los municipios de Conil, San José del Valle y Trebujena. Según los resultados, Algeciras, Jerez, Sanlúcar y Puerto Real son los que reflejan las cuotas más elevadas con importes por encima de los 700 euros. En el lado opuesto, el municipio de Torre Alháquime seguido de Alcalá del Valle, Villamartín, Espera y Setenil son los que figuran con las tasas más reducidas.

El segundo ejemplo se refiere a la tasa de basura que tendría que pagar un establecimiento comercial con tres empleados, situado en calle de primera categoría y con una superficie de 100 metros. En este caso, el resultado es similar: sube el impuesto con respecto a 2015 en Conil, San José del Valle y Trebujena. Y son El Puerto, Algeciras y Sanlúcar los que figuran con cuotas más altas, superando los 400 euros.

Pero, sin duda, uno de los impuestos que más llama la atención es el que aplica por inicio de actividad económica y licencia de apertura. Lo hace por dos motivos: el primero, por las cantidades tan altas que se dan en varios municipios y, en segundo lugar, por la enorme diferencia con los más 'baratos'. Así, destaca el caso de Tarifa, donde por abrir un nuevo establecimiento hay que pagar más de 3.500 euros; mientras que si se hace en El Gastor apenas llega a los 40.