Batida de la Guardia Civil contra los petaqueros que operan en la Bahía

Cádiz/La Guardia Civil desató en la mañana de este martes las hostilidades contra los señores del petaqueo, un negocio al alza en el entramado del narcotráfico y cuya aportación, en forma de garrafas de gasolina, es esencial para mantener el incómodo trasiego de las narcolanchas por las aguas del litoral gaditano. Intentar explicarle a quienes ven en la distribución de combustible para los narcos una actividad tan inocente como un payaso en un cumpleaños es tan complicado como hablarle de los perjuicios del colesterol a un chicharrón de Chiclana. Yo no hecho na malo... Dirán. Y el caso es que, a tenor de la legislación vigente, habrá hasta quien les conceda algo de razón. Pero la realidad es muy distinta. Máxime después de que en 2018 el Gobierno situara a las gomas que traen droga hasta España fuera de la ley. Así las cosas, la Guardia Civil de la Comandancia de Cádiz ha decidido que se están cruzando unas líneas rojas cada vez menos difusas y que hay que poner pie en pared. Y así lo hicieron ayer, cuando sus agentes se llevaron decomisadas ocho embarcaciones que, presuntamente, se dedicaban al lucrativo negocio de llevar miles de litros de combustible hasta las narcolanchas que esperan fondeadas al pairo a unas millas de la costa. 

Todas las embarcaciones se encontraban fondeadas irregularmente en el Puerto Deportivo de Gallineras, en San Fernando, desde donde inician sus actividades. Según informaron fuentes del instituto armado, las barcas retiradas carecían de folio identificativo y de matrícula, y han sido puestas a disposición de la administración de Aduanas de Cádiz para su destrucción.

Los dos puntos más calientes actualmente del petaqueo son la desembocadura del Guadalquivir y el muelle de Gallineras. Allí, camufladas entre pequeñas embarcaciones recreativas y pesqueras, hay quienes se dedican a una actividad cada vez más perseguida. Existen varios clanes muy asentados en San Fernando que están al mando de las operaciones, pero no puede decirse que se hagan cargo de toda la logística propia que necesitan los narcos que, prácticamente, viven durante semanas en las gomas ante la imposibilidad de tocar tierra. “Ellos se ocupan básicamente de la gasolina. Las compran en grandes cantidades en gasolineras low cost de la provincia, sobre todo de la zona de Jerez y la campiña, y las trasladan hasta las gomas”, comentan fuentes de la investigación. De la ropa seca, las tarjetas de internet, los víveres y hasta las tiendas de campaña que los narcos utilizan para poder hacer frente a tantos días en el mar se encargan otros grupos. 

Tanto la Guardia Civil como otros colectivos antidroga y la propia Fiscalía llevan tiempo solicitando un endurecimiento de las penas por petaqueo, aunque hasta el momento la legislación sigue siendo bastante laxa en este aspecto. De hecho, en el dispositivo de ayer se retiraron ocho embarcaciones pero no hubo detenidos. La intención de la Benemérita es, como mínimo, golpear en su economía y tratar de ponerles en dificultades. De hecho, advierten que la de ayer en La Isla no va a ser un caso aislado y que próximamente seguirán actuando contra estas embarcaciones que se han convertido en indispensables para el negocio del narcotráfico.

Los caños de Sancti Petri se han convertido en un lugar idóneo para que las petaqueras actúen. No obstante, la zona, en marea baja, tiene poca profundidad y hay mucho fango, lo que más de una vez ha deparado accidentes. Es el eterno juego del gato y el ratón en versión marinera.

En el dispositivo, dirigido por la Jefatura de la Comandancia de la Guardia Civil de Cadiz, tomaron parte ayer efectivos del Servicio Maritimo Provincial de Cadiz apoyados por personal de Huelva, la Compañía de Chiclana de la Frontera, el grupo Pegaso y OPC.