La caza dispara la economía gaditana

Enfoque de Domingo | Un motor para la provincia

La actividad cinegética genera unos 7.200 puestos de trabajo y millones de euros al año

Cádiz cuenta con una diversidad de especies que hace que la visiten cazadores de todo el mundo

La lucha del Seprona por mantener la pureza

Escopetas preparadas para una montería. / Julio González

La provincia de Cádiz cuenta con una diversidad de especies tan numerosa y unas poblaciones tan abundantes que la convierten en un paraíso para los amantes de la caza. La cuestión tiene su importancia si, más allá de echar un somero vistazo al número de licencias, de cotos privados o de hectáreas reservadas para actividades cinegéticas, nos detenemos en lo que esto supone a niveles económicos. Existen diferentes estudios sobre el impacto que la caza tiene en la economía o el turismo, pero en este artículo vamos a tomar como referencia el elaborado por Deloitte para la Fundación Artemisan (fundación privada sin ánimo de lucro dedicada a la divulgación e investigación en temas de caza). Según este informe en Andalucía el gasto traccionado podría rondar unos 1.700 millones de euros anuales y, siguiendo la misma sistemática, podría estimarse en una cuantía de unos 200 millones de euros para la provincia de Cádiz, contando el efecto económico directo, indirecto e inducido. Además se estima que esta actividad crea de unos 7.282 puestos de trabajo en la provincia.

Según el primer informe Impacto Económico y Social de la Caza en España, elaborado como hemos dicho por Deloitte para la Fundación Artemisan y presentado en 2019, el gasto traccionado (efecto económico directo, indirecto e inducido) en España era de más 6.475 millones de euros al año y crearía 187.000 puestos de trabajo. Asimismo, el gasto directo de la actividad cinegética superaría los 5.470 millones de euros, de tal forma que la actividad representa el 0,3% del PIB. Esta cifra equivale al 13% del sector agrícola, ganadero y pesquero, al 4% del sector de la construcción o al 9% del sector financiero. En cuanto a la contribución a las arcas públicas, el informe afirmaba que la caza aporta 614 millones de euros, de los cuales el 33% son aportados directamente en concepto de tasas e impuestos para cazadores. El informe destaca que los cazadores invierten en torno a 300 millones de euros en actuaciones de conservación de la naturaleza, de los cuales más de 230 millones son destinados a repoblaciones y otras inversiones de conservación medioambiental, y 54 millones al mantenimiento de accesos, pantanos, podas, mejoras del monte y cortafuegos, entre otros.

Pero más allá de estas frías –aunque importantes– cifras, lo cierto es que Cádiz posee una enorme riqueza cinegética, debido a la diversidad de especies y a la dimensión de sus poblaciones, propiciadas por la gran diversidad de ecosistemas presentes. En el caso de la caza menor destaca la campiña de Cádiz, con el conejo y la perdiz roja como especies emblemáticas. Los periodos hábiles de caza ya se iniciaron el pasado mes de agosto con el conejo y con la media veda para palomas y codornices, y el próximo 11 de octubre se inicia el esperado periodo de caza de la perdiz roja en la que destaca la modalidad de ojeo. En esta fecha también se inicia la tradicional caza de liebres con galfos atraillados hasta el mes de enero.

Para la caza mayor destacan las zonas serranas y el área de alcornocales con las especies cinegéticas propias de caza mayor como son el ciervo, gamo, jabalí, cabra montés y el corzo morisco.

Empieza el periodo hábil de caza para los ciervos y gamos el próximo 16 de octubre, extendiéndose hasta mediados de febrero, periodo en el que se concentran las actividades de caza colectivas propias de esas especies en las modalidades de monterías, ganchos y batidas.

En el caso de la cabra montés su caza se realiza en las zonas mas elevadas de las sierras de Grazalema y su entorno realizándose en la modalidad de rececho hasta finales de abril.

En la caza mayor hay que destacar la singularidad que representa el trofeo del corzo morisco por ser un ecotipo propio de las provincias de Cádiz y Málaga. Esta especie presenta un periodo de caza estival comprendido entre el 10 de julio y el 15 de agosto, y otro periodo primaveral que se extiende desde el 1 de marzo al 15 de abril, realizándose su caza en las modalidades de rececho y batidas de corzo.

En la provincia existen 815 cotos de caza, con una superficie de 550.860 hectáreas

Además, la actividad cinegética ofrece múltiples beneficios, tanto económicos, como sociales (creación de empleo) y medioambientales. Toda esta riqueza cinegética se debe en buena parte al cuidado que se le profesa en los cotos de caza, tanto de titularidad privada como públicos (ayuntamientos y CMA). En cada uno de dichos cotos la caza se practica de forma ordenada, siguiendo lo previsto en cada Plan técnico de caza y en la Orden general de vedas cada temporada.

La gestión de la caza conlleva una importante labor técnica y administrativa, que se realiza a través de diferentes trámites, como son: Régimen de autorizaciones a cotos de caza. Igualmente, la expedición de licencias de caza y el mantenimiento del registro de caza (con unas 17.000 licencias de caza vigentes en la provincia); además está la gestión de la caza en los montes propiedad de la Junta de Andalucía, con unas 23.000 hectáreas en las que se realiza tanto un aprovechamiento de caza menor (a través de su adjudicación a Sociedades Deportivas de Caza) como de caza mayor, a través de la empresa publica EGMASA.

En el caso concreto de la provincia de Cádiz, las licencias de caza en vigor para cazadores ascienden actualmente a la cifra de 17.000. Asimismo en la provincia hay constituidos 815 cotos de caza, que suman una superficie de 550.860 hectáreas, lo que representa que el 75 % aproximadamente del total de la superficie provincial está acotado para la caza. De ellos 774 son cotos privados de caza que suman una superficie de 477.304 hectáreas, de los que 262 tienen aprovechamiento de caza mayor, que aportan una cifra de 222.390 hectáreas, el resto pertenece exclusivamente a caza menor.

Dato también reseñable es que desde la Delegación de Medio Ambiente se dan al año unas 350 autorizaciones excepcionales de caza para cazadores de fuera de Andalucía, que no teniendo licencia aquí acreditan la tenencia en su país de origen y se les expide una temporal. En general se trata de viajes de caza organizados que suelen atraer a público con un alto poder adquisitivo y tiene un enorme potencial. En la provincia existen algunas empresas especializadas en la organización de este tipo de paquetes.

37 Comentarios

Ver los Comentarios

También te puede interesar

Lo último