La Comisión de la Sequía mejora las restricciones al riego en Cádiz pero se mantienen las de uso urbano
El suministro agrícola en los embalses del Guadalete pasa de 67 a 102 hectómetros cúbicos
En Barbate y Celemín, la dotación al riego se duplica, superando incluso su media histórica
La Comisión de la Sequía suaviza las medidas en el campo en la Demarcación Guadalete-Barbate

Esta semana iba a ser (se sabía) la del esperado respiro a las restricciones de agua. Tras un alivio de luto inicial a primeros de mes (que bajó al 40% el recorte en regadío, por ejemplo), la Comisión de la Sequía en la Demarcación del Guadalete-Barbate se reunía ayer para calibrar las políticas de riego y abastecimiento en la provincia, tras los acumulados de marzo. Así, la mesa acordó por unanimidad de los miembros presentes – que no fueron todos los integrantes, debido a problemas técnicos– mejorar las dotaciones de suministro agrícola en las zonas que dependen de las balsas de las cuencas.
De este modo, en los embalses pertenecientes al Sistema Guadalete –que actualmente se sitúa en un escenario de escasez moderada (prealerta)–, el volumen de riego pasa de 67 a 102 hm3, mientras que se mantienen las medidas establecidas hace unas semanas en lo relativo a dotación urbana (225 litros por persona y día) e industrial (un 10% de reducción, lo que supone 3,3 hm3).
Unas cantidades –que son las que aparecen en la nota hecha pública desde la Comisión de Sequía– que no coincidirían con la recomendación técnica de establecer una reducción del 25% en la dotación de regadío en la cuenca. Así, según las proyecciones realizadas en el informe para la mesa ayer reunida, con las actuales restricciones en demanda urbana e industrial, y una mengua del 25% en el volumen destinado a usos agrícolas, el sistema del Guadalete se mantendría por encima del umbral de escasez moderada durante al menos los dos próximos meses –abandonándose el escenario de alerta a partir del 10 de mayo–, entrando otra vez en escasez moderada a finales de verano, cuando acumulara 706 hm3. Dentro de estos cálculos, el volumen total en septiembre se colocaría en un 47,2% y 662,8 hm3 (en octubre de 2024, el acumulado era de 310,7 hm3).
Respecto a los embalses de Barbate y Celemín –que constituyen el Sistema de Barbate–, ambos han arrojado esta semana un volumen total de 140 hm3 –a finales de febrero, apenas llegaban a los 60 hm3;y en octubre de 2024, tan sólo alcanzaban los 31,2 hm3–. Ante el escenario de normalidad que suponen estas cifras, la Comisión ha decidido duplicar el volumen medio de riego en la cuenca, pasando de 27 a 54 hm3. Esta cantidad supera incluso el histórico de su aportación media, que se sitúa en 53,77 hm3.
Una proyección sin restricciones al regadío en el sistema barbateño se traduce en un estado de escasez moderada en sus dos embalses en los próximos meses, a no ser que se dé un rango de precipitaciones dentro de la media histórica. La recomendación técnica en este caso se situaba en una disminución en la dotación de regadío del 20% (quedándose en 43 hm3), algo que colocaría a la zona de influencia en una situación de normalidad –excepto en el caso de precipitaciones por debajo de los mínimos, cuando entraría en un escenario de escasez moderada–.
En lo que respecta a los sistemas de la Sierra de Cádiz y Abastecimiento a Tarifa, en situación de normalidad, la Comisión de la Sequía se reafirma en que no es necesario adoptar ningún tipo de disposición a fecha actual.
Las medidas acordadas ayer por la Comisión se mantendrán, en principio, durante todo lo que queda del año hidrológico (hasta que finalice el próximo mes de septiembre), a no ser que la situación haga necesaria una revisión.
Esta mitigación del protocolo respecto a la sequía llega cuando los embalses de la Demarcación Guadalete-Barbate acumulan un volumen de 886 hm3, lo que supone el 53,67 por ciento de su capacidad total. La cifra suma 531 hm3 a los de hace un año, cuando los recursos embalsados eran 355 hm3 (21,38 por ciento). Según los datos que maneja el principal sistema de explotación de la provincia, los embalses pertenecientes a la cuenca del Guadalete estaban (a fecha de 23 de marzo) al 52,6% de su capacidad -tres de ellos, Bornos, Arcos y Los Hurones, a más del 93%; la inmensidad del Guadalcacín, al 41,2%, y en el otro extremo, el embalse de Zahara-El Gastor, al 27,9%-. En una semana, estas cinco reservas sumaron más de 100 hm3 cúbicos a su total.
A lo largo de la semana, se han llevado a cabo reuniones en las mesas de sequía de las distintas demarcaciones andaluzas, registrándose una relajación en general de las restricciones. Así ha sido, por ejemplo, dentro de las Cuencas Mediterráneas Andaluzas (que afecta al Campo de Gibraltar); o en el sistema del Tinto-Odiel en Huelva, que ha eliminado las limitaciones.