Cádiz sufrirá más el impacto de la crisis y necesitará al menos dos años para recuperarse

La provincia de Cádiz será una de las zonas de España que más sufrirá el impacto económico de la crisis del coronavirus y necesitará al menos dos años para recuperarse en el mejor de los casos. Éste es el diagnóstico del Colegio de Economistas de Cádiz, que ha elaborado un análisis sobre las consecuencias del Covid-19 a partir de una encuesta a sus colegiados y a 32 expertos de diferentes áreas.

La situación de la economía gaditana se agrava por algunas de sus características estructurales como el escaso grado de diversificación, la debilidad empresarial, la baja capacidad de emprendimiento, la inadecuada asignación y uso de ayudas públicas y la escasa dotación tecnológica, según revela el informe Impacto económico y social de la pandemia COVID-19 en la provincia de Cádiz: reflexiones para la reactivación.

El 95% de los colegiados opinan que la situación de la provincia “ha empeorado mucho” o “ha empeorado” en relación a los tres meses anteriores a la pandemia. Esta apreciación es superior en dos puntos a la que estiman para Andalucía, pero un punto menos a la estimada para España.

Para el próximo año el 85% señalan que la economía de Cádiz “empeorará mucho” o “empeorará”. Las

previsiones de empeoramiento son del 74% para Andalucía y del 80% para España. Es más, la mayoría de los economistas gaditanos (63%) considera que el plazo de recuperación de la economía provincial será superior a los dos años.

Los sectores más perjudicados serán: el comercio (99%), turísmo (98%), la hostelería y ocio (97%), y el creativo y cultural (95%). En cuanto a los que que menos sufran, el estudio apunta al agropecuario (el 43% opina que no tendrá impacto negativo o el 9% que crecerá), los transportes (igual opinión del 44% y 6%) y la logística (36% y 6%).

La construcción sufrirá un impacto negativo medio según el 51% de los encuestados. Un 10% considera que no se verá afectada. Las perspectivas para la industria son parecidas, se espera un impacto negativo

medio, aunque no se espera un crecimiento a corto plazo.

Solicitudes del Ingreso Mínimo Vital

Uno de los indicadores que refleja que el mayor sufrimiento de Cádiz es el alto número de solicitudes de Ingreso Mínimo Vital, según el estudio, que apunta a que esta crisis se suma a "la brecha histórica estructural de magnitudes económicas de relevancia como: renta per cápita y nivel de desempleo, de la que aún no se ha recuperado la provincia, al alto desempleo crónico, a la fuga de jóvenes y a la huida de talento.

"La crisis se ve agravada por la especialización productiva en sectores muy sensibles (comercio, turismo, hostelería, industria aeronáutica, sectores creativos…), por la escasa diversificación, debilidad financiera y tecnológica de sus empresas, reducido tamaño empresarial, carencias de formación y de espíritu emprendedor en comparación con otros territorios", destaca el estudio.

Atomización empresarial

Uno de los ejemplos de la atomización del tejido productivo es que la escasez de empresas de tamaño superior a los 100 empleados no sólo es un problema de España (con solo 2,67 empresas/10.000 habitantes; frente a una ratio de más de 4 en Alemania). Sino que este este déficit se agrava en el caso de Andalucía(1,54 empresa/10.000 habitantes) y especialmente en Cádiz con 1,13 empresas/10.000 habitantes, según los datos del Instituto Nacional de Estadística que recoge el estudio.

En 2019, a pesar de una leve recuperación tras la crisis de los años pasados, la densidad total de Cádiz es de 4,98 empresas por cada 100 habitantes frente a las 6,16 de Andalucía y las 7,16 de España.

La fragilidad empresarial de la provincia se debe en gran medida a su pequeño tamaño. Los expertos consultados coinciden en que son necesarias medidas para frenar la desaparición de las empresas y estimular la creación de otras nuevas que tengan "más impacto social, capacidad de crecimiento y estén promovidas por equipos humanos capacitados y sólidos".

Por lo tanto, los expertos destacan la necesidad de "aumentar el tamaño empresarial capaz de modernizar modelos de negocio, de aumentar también la internacionalización y de abordar la renovación tecnológica y la necesidad de favorecer normas sociales tolerantes con el cambio y la innovación".

A ello se suma el alto desempleo, "una lacra consecuencia de la débil capacitación profesional y el escaso tamaño y eficiencia de gran parte de su empresas y organizaciones". Los autores del informe reclaman que Cádiz participe en los planes de la administración central y de la Junta de Andalucía para fomentar el emprendimiento y la innovación.

"Este reto precisa de la destacada participación de la Universidad como motor en proyectos de alto potencial fruto de la transferencia investigadora y de su oferta de formación orientada a la competitividad de las empresas anticipándose a sus necesidades formativas y de empleo", sugiere el estudio.

La debilidad empresarial también explica que la provincia de Cádiz sea una de las zonas donde se ha adoptado en menor medida el teletrabajo, según datos del Observatorio de Emprendimiento RED GEM España. "Este comportamiento puede estar directamente relacionado con la estructura del sector servicios de nuestra provincia, en la cual subsectores como la hostelería y el comercio tienen un alto peso específico", apunta el informe.

Capacidades y recursos sin explotar

Los colegiados y expertos entrevistados coinciden también en que la provincia tiene múltiples capacidades y recursos sin explotar, fuentes de nuevas oportunidades que pueden canalizarse, por ejemplo, con fondos del Plan de Recuperación Social y Económico de Europa.

Entre los proyectos a desarrollar, destacan el Hospital Comarcal Bahía de Cádiz, la conexión ferroviaria de la línea Algeciras-Bobadilla-Córdoba-Madrid, el Acceso Sur al Puerto Bahía de Algeciras, el Desarrollo del Polígono Industrial y Logístico Las Aletas, la Creación de la Mesa de Turismo de Cruceros o la Creación ”Sello de Seguridad Global Cádiz”, según recoge el informe.

Otra conclusión es que debe de haber una estrecha colaboración público-privada. Los participantes en el estudio valoran positivamente -y creen que deben mantenerse en el tiempo- las acciones de la Administración que han facilitado el acceso a la liquidez de las empresas con avales públicos y la flexibilidad introducida con la figura de los ERTES.

La modernización que necesita Cádiz también "pasa por la coordinación y simplificación de trámites en la administración pública para hacerla más cercana"y eficiente". Asimismo, los expertos y y colegiados que han participado en el informe abogan por el "talento y las personas como recursos estratégicos del futuro de Cádiz en el marco de un nuevo contrato social de una sociedad tolerante, abierta, dinámica y diversa que propicie la igualdad de oportunidades y el estado del bienestar."