Salud sin fronteras
La IA y la humanización
Cádiz/Este domingo 10 de noviembre los gaditanos vuelven a las urnas siete meses después para elegir a sus representantes en el Congreso de los Diputados. Cádiz determinará el destino de nueve de los 350 escaños en juego, un reparto que no es directamente proporcional al número de habitantes de cada territorio. Doce partidos políticos pugnan por estos nueve cargos electos.
La relación entre población y diputados se regula con el objetivo de que todos los territorios estén representados y que las provincias más pequeñas tengan también voz en el Parlamento, aunque en el caso de Cádiz sí que está dentro de la proporcionalidad ya que, atendiendo al número de habitantes, le corresponderían exactamente 9,48 escaños. En un sistema que fuera directamente proporcional al número de habitantes, provincias como Soria no obtendrían representación (0,72) mientras que Madrid se llevaría casi una séptima parte del Parlamento con 48 representantes.
La provincia gaditana, que en los comicios de este 10-N presenta un censo de 1.002.286 votantes, cuenta con una proporción de 111.365,111 electores por cada escaño repartido, el segundo mayor rango de las provincias andaluzas por detrás de Sevilla (128.977,083, doce diputados).
¿Y qué hay que hacer para obtener un diputado en Cádiz? Históricamente en la provincia se ha necesitado una media del 17,8889438 por ciento de votos válidos para lograr un escaño. En las elecciones del pasado 28 de abril obtuvieron representación cinco fuerzas políticas y de ellas Vox obtuvo su representante con un 13,1 por ciento de votos. También obtuvo uno el PP con el 14,9 por ciento, mientras que Unidas Podemos y Ciudadanos lograron dos diputados con el 16,57 y el 19,71 por ciento de los votos. El PSOE, ganador con tres escaños, logró un apoyo del 31,5 por ciento. Este reparto tan particular se debe, claro, a la famosa Ley D'Hont.
La Ley D'Hont es un sistema electoral de cálculo proporcional que divide el número de votos para cada partido entre el número de escaños con los que cuenta la circunscripción. Es decir, que si en Cádiz se reparten nueve diputados, hay que dividir el número total de votos que ha recibido cada partido entre uno, dos, tres... hasta nueve.
De todos los resultados obtenidos, se escogen las nueve cifras más altas. No tiene por qué coincidir, por tanto, el último en recibir escaño con el partido menos votado. De hecho, en los comicios del 28-A el último diputado por Cádiz fue para Unidas Podemos, tercera fuerza en número de votos.
También te puede interesar
Lo último
3 Comentarios