Hacia la declaración de especie protegida

Un aumento de la protección de la holoturia convertiría en penal el delito por su captura.

P-M.d. Cádiz

15 de agosto 2016 - 01:00

La legislación actual andaluza es bastante clara y rotunda en relación con la holoturia, pese a no tener una regulación específica. Según explican desde la Junta de Andalucía, el pepino de mar "es una especie que no puede ser capturada en el ejercicio del marisqueo ni tampoco en la pesca marítima de recreo".

Al ser un equinodermo, su captura sólo estaría permitida mediante la modalidad de marisqueo (ya que la pesca marítima sólo permite capturar peces). Y sobre el marisqueo determina el decreto andaluz 387/2010, que los moluscos "bivalvos, equinodermos, tunicados y gasterópodos marinos filtradores sólo podrán capturarse en zonas de producción delimitadas y clasificadas". Esas zonas de producción las recoge una orden de 15 de julio de 1993, que habla tanto de las zonas declaradas expresamente (prohibiendo la recolección fuera de ellas) como las especies que pueden ser capturadas, no figurando el pepino de mar en ninguna de ellas.

Teniendo en cuenta, pues, que la única posibilidad de captura de holoturias sería que la Dirección General lo autorizara expresamente, hay que reseñar también que actualmente el pepino de mar es una especie que no está sometida a ninguna medida de protección, "por lo que no sería de aplicación ninguna agravante en este sentido", explican fuentes de la administración autonómica.

Y es en este punto, precisamente, donde algunos se detienen para plantear una variación encaminada a asegurar la conservación de estos ejemplares que pese a cumplir una función en el medio marino (filtrar y limpiar las aguas) están siendo arrasados con esta práctica ilegal del marisqueo tan en auge actualmente. "Algo se está moviendo porque hay una alta sensibilización al respecto, sobre todo por el nivel que está llegando a alcanzar la captura de estos ejemplares", comenta el oficial de la Policía Local Ernesto Pérez. En este sentido, se estarían intentando elaborar unos informes biológicos que establezcan con claridad la situación actual así como los problemas y consecuencias de esta captura masiva que se está produciendo. Todo ello con la intención de que la holoturia sea declarada especie protegida; algo que, entre otras cosas, aumentaría a la categoría de penal los delitos por su captura.

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