Una joven familia de Conil se enfrenta al derribo de la casa en la que residen

Una familia de Conil, formada por David Sánchez y María del Mar Villara, está viviendo una situación límite, al estar próximo el derribo de la casa que comparten en el carril de Los Mirlos número 6, muy próximo a la carretera nacional 340 y en el límite del término municipal conileño con el vecino de Chiclana.

Al no atender ellos la orden judicial que les ha instado desde el Juzgado de Instrucción Número 5 de Cádiz, par que derriben la casa en la que residen, será la Junta de Andalucía, la que la derribe entre el 15 y el 30 de noviembre.

Según ha explicado, David Sánchez, de 41 años, tras la construcción de su casa a principios del año 2012, el Ayuntamiento levantó un expediente urbanístico que le llevó al pago de una multa de 4.880 euros. En aquella fecha, acudió al área de Urbanismo para saber si podía seguir con la construcción, aconsejándoles los responsables de dicha concejalía que la terminase, ya que eso estaban haciendo muchos vecinos del término municipal.

Dos años más tarde, recibe una notificación de la Fiscalía de Cádiz, en la que le informan de que deben hacer frente a una sanción por construcción sin licencia, debiendo abonar 2.800 euros de multa y proceder al derribo de lo construido.

Fue entonces cuando inició un proceso judicial que se ha prolongado más de una década, instándole el juzgado gaditano a que debe derribar la casa y restituir el terreno a como estaba en su origen, algo a lo que se ha negado el propietario de la vivienda. Se trata de un suelo cedido por sus padres, ya que en las cercanías se levanta la casa de su madre desde hace 42 años, y la de su abuela que ya cumple más de un centenar de años desde su construcción.

En esa década ha invertido más de 21.000 euros en abogados y en la regularización de su propiedad que está considerada como Asimilado Fuera de Ordenación (AFO) desde mayo de 2021, pagando desde 2014 el Impuesto de Bienes e Inmuebles (IBI), el agua y la basura al Ayuntamiento de Conil, ya que es su vivienda habitual.

Tras recibir la última notificación por parte de agentes del Servicio de Protección a la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil, ha presentado un recurso ante la Junta de Andalucía, para intentar paralizar el derribo. El abogado que sigue el caso, asegura que no entiende cómo quieren derribar la casa, si su situación está regularizada desde hace varios años.   

Esta familia cree que se está cometiendo una injusticia con ellos, ya que no están en un suelo protegido y cerca de la carretera nacional. David Sánchez, asegura que “si tiene que ir a la cárcel irá, ya que le han destrozado la vida, ya que todo lo que tenía lo ha invertido en esta casa, no teniendo otro lugar donde irse”.