"He pagado un precio demasiado alto"

El ex alcalde portuense Hernán Díaz está a pocos meses de cumplir el periodo de siete años de inhabilitación para cargo público que le impuso la Audiencia Provincial por el Caso Fuentes

Teresa Almendros El Puerto

17 de marzo 2013 - 05:01

El 17 de julio de 2006, la Audiencia Provincial de Cádiz dictaba una sentencia por la cual se inhabilitaba al entonces alcalde de El Puerto y presidente de Independientes Portuenses, Hernán Díaz, a siete años de inhabilitación para cargo público. Unos días después, el 21 de julio, un decreto municipal firmado por el entonces número dos del equipo de gobierno, el socialista Ignacio García de Quirós, cesaba a Hernán Díaz en sus funciones como primer edil. Dicha sentencia se dictaba por el llamado Caso Fuentes, por un delito de prevaricación, al haber nombrado a dedo al responsable de la Policía Local en 1995.

Quedan poco más de tres meses para que expire, por tanto, el periodo de inhabilitación para cargo público que pesa sobre el ex-alcalde independiente, pero no hay que olvidar que Hernán Díaz sigue inmerso en un extenso laberinto judicial con distintos casos abiertos en la mayoría de los cuales se pide también su inhabilitación.

En declaraciones a este periódico, Hernán Díaz rechaza de forma tajante cualquier intención de seguir en la política activa en un futuro. "Póngase en mi lugar", le dice a la periodista, para añadir que "después de las barbaridades continuadas que se han dicho sobre mí y las injustas denuncias" no le quedan ganas de volver a la palestra.

"He pagado un precio demasiado alto por los 15 años que estuve de alcalde y los más perjudicados han sido mi familia y mi salud. Le he dedicado a la política cientos de horas y en cuanto a la salud, llevo hechos diez by-pass".

Han pasado ya 27 años desde que Hernán Díaz, ex-militante del Partido Popular, fundara Independientes Portuenses, un partido en el que sigue militando pero en el que ya no está al timón. "A veces me llaman para invitarme a algún acto, pero ya no estoy ni en primera ni en segunda fila, soy un militante más", asegura.

También se muestra convencido de que "más tarde o más temprano la verdad prevalecerá, después de tantas mentiras y tantos infundios. Yo estoy muy satisfecho de mi gestión y repito que me he jugado la salud y es mi familia quien lo ha pagado. Yo podía haber colocado a mis hijos en cualquier empresa y no lo hice, he querido ser el más honesto y me ha saltado la suciedad en la cara", lamenta.

Únicamente en la calle sigue hablando Hernán de política, con muchas personas que aún le paran y le preguntan qué hubiera hecho él en tal o cual problema de los que surgen en la ciudad.

Pero a pesar del deseo de Hernán Díaz de ser un portuense más, lo cierto es que aún le queda por delante un rosario de procesos judiciales inconclusos.

Los más próximos a resolverse con los de Pinar de Coig -cuyo juicio fue en noviembre y del que debe estar a punto de dictarse la sentencia- y la Casa de las Cadenas, que se juzgó a finales de febrero. Por ambos casos se le acusa de un presunto delito de prevaricación y se pide su inhabilitación para cargo público.

Su abogado, Felipe Meléndez, no da abasto para llevar al día el rosario de procesos en marcha y explica que hace unos meses tuvo que presentar recursos ante la Audiencia Provincial de Cádiz para pedir que la veintena de autor distintos dictados a raíz de la macrodenuncia por presuntos delitos urbanísticos en distintas urbanizaciones ilegales se unificaran en un solo procedimiento, ya que, como argumenta, "en lugar de abrirse un único caso por un delito de prevaricación continuada, se optó por abrir uno diferente por cada urbanización a la que se dio luz y agua. Yo no compartía ese criterio y tras presentar veinte recursos diferentes, en enero se decidió unificar todas las actuaciones en un único proceso", explica.

Felipe Meléndez asegura que es difícil, como abogado, "abarcar mental y profesionalmente un caso como el de Hernán Díaz", contra el que cree que ha habido una "persecución". Incluso sobre el caso Fuentes, por el que cumple condena el ex-alcalde y que precisamente le costó el cargo, aún ahora Meléndez considera que "no fue una prevaricación" y cree que en el caso de su cliente ha habido más de un agravio comparativo en comparación con otras situaciones que se han vivido en otros municipios de la provincia.

La próxima cita de Hernán Díaz con el banquillo será el día 21, de este mes, también por un supuesto delito de prevaricación por el que el fiscal solicita ocho años de inhabilitación para empleo o cargo público, al sostener que Hernán Díaz otorgó una licencia de edificación para dos viviendas y dos locales comerciales en la calle San Francisco, a sabiendas de su ilegalidad.

El fundador de Independientes Portuenses tendrá, por tanto, que seguir en el candelero algún tiempo más, aún a su pesar.

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