Navantia prejubilará a 650 trabajadores en los tres astilleros gaditanos
Sector naval
Suponen el 41% de los 1.575 empleados fijos con los que hoy cuentan los astilleros de Cádiz, Puerto Real y San Fernando
Si se cumple el plan estratégico, la reposición del 75% de empleados fijos dejará las plantillas en menos de 1.200 personas
Cádiz/Las tres factorías de Navantia en la Bahía de Cádiz verán marchar en los próximos cuatro años a 645 de sus trabajadores fijos. Son todos aquellos que entre 2019 y 2022 hayan cumplido los 61 años de edad y supone aplicar lo firmado en Madrid dentro del plan estratégico de la compañía pública.
Estas prejubilaciones suponen dar salida al 41% de la plantilla actual de los tres centros de trabajo, que hasta la fecha suman 1.575 empleados fijos. Según lo firmado, y según datos ofrecidos por los comités de empresa de las tres factorías de la Bahía, la reposición de estos empleados de plantilla se realizará con un 75% de nuevos trabajadores fijos y el 25% restante de manera eventual. Eso significa que, cuando llegue el año 2022, si las necesidades de producción no lo requieren (en el plan estratégico también se aclara que podrá aumentar ese porcentaje si los pedidos lo reclaman), la plantilla fija de los tres astilleros gaditanos quedará en torno a los 1.180 empleados.
Por factorías, la de San Fernando es la que mayor número de trabajadores tiene actualmente, con unos 1.000 fijos. Por ello, será la que más cantidad de prejubilados sume en los próximos cuatros años, con alrededor de 400. La planta isleña será, además, la que abandere en el marco de la Bahía de Cádiz la construcción naval con la fabricación de las cinco corbetas para Arabia Saudí, contrato que ha sido una de las piezas clave para poder firmar el plan estratégico.
Salidas en las tres factorías
De San Fernando saldrán 400 prejubilados, de Puerto Real 211 y de Cádiz 36 empleados, todos con 61 años cumplidos entre 2019 y 2022
Después está Puerto Real, que actualmente posee unos 450 trabajadores fijos y que, de aquí a 2022, perderá 211 trabajadores mayores de 61 años. En el caso de la planta puertorrealeña, la carga de trabajo segura se reduce al último petrolero (el tercero se entrega en pocos días) y la adjudicación de la subestación eléctrica para el campo de gas de Equinor en Noruega, cuyos trabajos no comenzarán hasta después del verano. Todo lo demás está pendiente: desde los buques para el Ejército de Tierra y el BAM comprometidos por la propia Navantia y la Sepi, hasta las partes del crucero que necesita el astillero francés de Chantier de l'Atlantique. Todo tiene aún que ser confirmado.
En tercer lugar, la factoría de Reparaciones de Cádiz capital. Hoy su plantilla es la más baja de la Bahía: 125 personas y, según el plan estratégico, saldrán en los próximos cuatro años 36 empleados fijos. Eso dejaría a la planta gaditana por debajo de los 100 trabajadores fijos. Además, como han expresado a este periódico fuentes de la planta gaditana, en este centro de trabajo se da una circunstancia anómala: hay más empleados de staff que de los gremios habituales de tajo, que están siendo suministrados por las contratas de industria auxiliar. Eso hace que, por ejemplo, las labores de mantenimiento de dique o de las grúas puedan verse afectadas si la reposición no se realiza pensando en los trabajos a pie de obra, aseguran.
Y, con esta infraestructura, el dique gaditano se enfrenta a un año que promete ser tan excelente como lo fue 2016 en cuanto a reparación de grandes cruceros. Aunque las fuentes consultadas no se atreven a fijar un número de buques, sí están seguros de que será elevado. Y el primero llegará a finales de este mismo mes. Será el Golden Era, de la compañía SkySea, que permanecerá 61 días en el dique gaditano y será sometido a una completa transformación, como ya ha hecho Navantia Cádiz con otros cruceros. Una vez acabada la reforma, saldrá de la capital gaditana como Marella Explorer 2. La estimación es que, de media, se necesiten unos 350 operarios de industria auxiliar, llegando a picos de 500 personas.
A continuación de este barco llegarán dos más, el The World, y el primero de los dos cruceros que repararán en la capital gaditana de una de las grandes compañías cruceristas del mundo, la Carnival.
El astillero gaditano toma medidas contra los efectos de la pintura de los barcos
La factoría de Navantia en Cádiz capital está tomando ya medidas para evitar los efectos que el chorreo ha tenido en el pasado en los vehículos que se encuentran aparcados en las inmediaciones de la planta. Y es que el uso de la pintura en los barcos, en función de la dirección del viento, ha provocado tiempo atrás quejas y hasta denuncias de usuarios que dejaban su coche estacionado en la carretera industrial o incluso dentro del aparcamiento de la estación de Renfe.
Ahora, en el interior de la factoría gaditana, junto a las grúas que se ven desde la puerta de entrada, se han instalado unas enormes estructuras metálicas sobra las que se colocarán unas mallas. Así, y en función de unos estudios elaborados por Navantia acerca de dónde puede ir a parar la pintura según el viento que sople, se evitarán efectos perjudiciales para los vehículos estacionados en las proximidades de la planta.
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