La provincia se echa a la calle para aclamar a los ciclistas

Gran ambiente durante todo el día en San Fernando a la llegada de la ronda y Algeciras, donde se situó la salida Miles de ciudadanos no quisieron perderse una jornada histórica

El pelotón enfila el puente Carranza para entrar brevemente en Cádiz antes de iniciar su camino hacia la meta de San Fernando.
El pelotón enfila el puente Carranza para entrar brevemente en Cádiz antes de iniciar su camino hacia la meta de San Fernando.
Redacción Cádiz

25 de agosto 2014 - 01:00

La provincia de Cádiz se mostró ayer a España tal y como es: hermosísima. Las vistas que dejó la televisión al paso del pelotón de la Vuelta Ciclista a España por distintos rincones fueron espectaculares: no sólo por cómo se veían nuestras ciudades sino por el apoyo que los ciudadanos ofrecieron en todo el recorrido a los ciclistas. En la meta, situada en San Fernando, a escasos metros del Observatorio de Marina, ese respaldo fue masivo y desde horas tempranas muchos isleños acudieron para vivir de cerca esta gran fiesta.

"Señora, ¿qué reparten?". "Gorras y camisetas", contesta satisfecha con su objetivo en las manos. Antes, algunas piezas de material de promoción de una de las marcas que se promocionan en la Vuelta volaba por los aires. Parecía que quien lo repartía, arrinconado contra la puerta de un garaje, intentaba apartar a los dueños de las manos que reclamaban uno de sus regalos. Apenas había 150 metros hasta la meta, situada en León Herrero, a la altura de la calle Almirante Faustino Ruiz. Todavía quedaba como una hora para que los ciclistas llegaran y se respiraba un ambiente festivo entre adultos y pequeños.

Ya hacía algunas horas que los más madrugadores en querer vivir el evento habían comenzado a tomar posiciones en la zona, acotada al tráfico y con toda la parafernalia -vallas protectoras, carpas, camiones de televisión o grúas para las cámaras- montada para la ocasión. La música que sonaba por la megafonía y el speaker de la organización ayudaban a crear el ambiente propicio. Incluso los más pequeños también pusieron su granito de arena con la Vuelta Junior, que realizó el último kilómetro de la etapa, bordeando el Parque Almirante Laulhé, en la que participaron escolares de la ciudad isleña que fueron escogidos antes de acabar el curso pasado después de una actividad deportiva en sus centros educativos. Una de las jóvenes ciclistas, Marta Jones, reconocía mientras acariciaba orgullosa la medalla lograda en su prueba, sentirse "emocionada y feliz por poder participar de alguna manera en la Vuelta". Desde las márgenes de la ruta limitada por vallas, los espectadores ya animaban, muchos con los aplaudidores hinchables en las manos para hacer cuanto más ruido mejor. Más tarde quienes estaban en primera fila pudieron ver los distintos vehículos que conforman la caravana publicitaria de la Vuelta Ciclista, todo un espectáculo que continuaría con los patrocinadores en el Parque Vuelta después de acabar todo, entre las zonas verdes del Almirante Laulhé.

Los amantes del ciclismo tampoco quisieron perderse este momento tan importante para ellos. Por eso acudieron ataviados con todo el uniforme ciclista, culote y maillot, gafas y casco, hasta intentaban avanzar entre la gente con su bicicleta. La Isla era un jolgorio a la espera de los verdaderos protagonistas de la jornada y el tiempo pasó volando.

El pelotón, que llegó a la ciudad agrupado para buscar un final al sprint, pasó raudo y veloz por esos metros finales alrededor del Parque, casi imperceptible a los ojos del público, que a pesar de todo mostraba su entusiasmo.

Quienes habían aguardado más allá de la meta, a la altura de la rotonda del torero Rafael Ortega, tuvieron la suerte de ver a los ciclistas, ya exhaustos por el esfuerzo, avanzando con menos prisas, pero sin apenas detenerse, hasta unos metros más adelante, donde los vehículos de los distintos equipos los recogían para encaminarse directamente al hotel. Sólo quienes tenían que estar presentes en la ceremonia de los premios permanecieron en el lugar. Otros se paraban con los periodistas que, como buenamente podían, hacían las entrevistas. E incluso algunos amablemente aguardaron a hacerse fotografías con la gente que los requería.

El alcalde de San Fernando, José Loaiza, fue el encargado de entregar el premio al ganador de la etapa. Luego volvería a subir al podio con los pequeños de La Isla que se subieron a la bicicleta con la Vuelta Junior y algunos de los corredores del Movistar (mejor equipo clasificado), mientras fotógrafos profesionales y aficionados, entre el público isleño, captaban la imagen.

A cada uno de los deportistas que recogieron su premio el público aglutinado en las inmediaciones aplaudía entre gritos de ánimo. Luego, en apenas unos minutos, la marea humana se encaminó al Parque, donde disfrutaron de las diversas actividades que las distintas marcas ofrecían para la ocasión. Desde sorteos, hasta pruebas con ruleta de colores para recibir un premio, o con un frisbee lanzado para colarlo en unas rendijas. Muchos se apuntaron a dar pedaladas solidarias: cada kilómetro solidario se convertía en kilos de alimentos. Otros probaban los productos promocionados.

Otra buena opción para vivir el momento, pero de manera más tranquila, fue sentarse en las distintas terrazas de la zona. Repletas durante unas horas. Fue una brillante jornada en la que San Fernando.

Cádiz

El paso de la Vuelta por la capital de la provincia fue meramente testimonial. Desde primeras horas de la tarde varios centenares de personas, muchas de ellas que abandonaron la playa exclusivamente para ver el paso de los ciclistas, se agolparon en la rotonda de la Zona Franca y sus alrededores. Fue apenas un sorbito previo a la gran jornada de hoy, cuando Cádiz será la salida de la tercera etapa. El paso de los motoristas de la Guardia Civil y los coches de los equipos fue el preámbulo para que los ciclistas pasaran como un rayo por delante de los gaditanos. "¿Ya está?", preguntaba una señora a su hijo. Pues sí. Es lo que tiene el ciclismo cuando no se está en el sofá, que es como ver pasar un suspiro. Eso sí, los que estaban en casa pudieron disfrutar de las impresionantes imágenes aéreas de ese interminable arenal que es la playa de Cortadura, la playa gaditana más desconocida.

Puerto Real

Los vecinos de la Villa y de barriadas como el Río San Pedro vibraron ayer con los ciclistas. Ni la velocidad del pelotón ni el calor que hacía a esa hora impidieron que las aceras de la localidad se llenaran para aplaudir a los héroes de las dos ruedas. Desde El Marquesado, donde se vivió un gran ambiente, hasta los puentes de la zona universitaria, se llenaron de un público que aplaudió con entusiasmo al pelotón mientras las cámaras de televisión captaba el paso de la Vuelta a España por Puerto Real. Tras pasar junto al Río San Pedro enfilaron hacia el puente Carranza, el único que todavía permite atravesar la Bahía sin tener que rodearla por más años que tenga.

El Puerto

El paso de la serpiente multicolor a El Puerto produjo ayer mucha expectación en las calles portuenses. El público pareció atender a la llamada realizada desde el Ayuntamiento para acudir a disfrutar de uno de los espectáculos deportivos más populares, y numerosos aficionados y familias completas, arroparon a los ciclistas a lo largo del recorrido urbano. Bañistas y veraneantes interrumpieron sus baños de sol y mar en las playas cercanas al recorrido, para acudir a contemplar a las grandes estrellas del ciclismo mundial. Aunque el ambiente se extendió a toda la ciudad y en especial a sus grandes avenidas, donde se pudo ver más público fue en las inmediaciones de la glorieta de la Estación, Pozos Dulces, Parque del Vino Fino, avenida de Sanlúcar, avenida de Fuenterravía, y rotonda del Oasis, junto al hospital Santa María del Puerto, donde el pelotón tuvo que reducir la velocidad para enfilar la calle Valdés, pasando después los ciclistas junto a la Plaza de Toros, todo un espectáculo. Otro punto elegido por el público para poder observar a los deportistas desde cerca fue la esquina de las Piscinas Municipales, donde los ciclistas se vieron obligados prácticamente a detenerse para tomar la última parte del recorrido portuense: la calle Aurora y las avenidas Micaela Aramburu, Ribera del Marisco y glorieta de Pozos Dulces. En este lugar, el público aprovechó el cuello de botella del estrechamiento del vial para animar a los ciclistas desde muy escasa distancia. El pelotón enfiló posteriormente en dirección a Cádiz por la antigua N-IV, circulando en paralelo al río Guadalete, entre los pinares de Valdelagrana y las salinas de la Tapa. Mucho público optó por quedarse en el centro de la ciudad al término del espectáculo deportivo.

Chiclana

El paso de los ciclistas por el centro de Chiclana transcurrió con normalidad y con numeroso público, pese a la dificultad que implicaba varios tramos debido a las obras del tranvía que se llevan a cabo en el tramo urbano de esta localidad. De esta manera, el pelotón llegó desde la carretera Nacional 340 y enfiló hacia la Rotonda de los Empresarios sobre las cuatro de la tarde, recorriendo posteriormente la Avenida Reyes Católicos, el puente de Nuestra Señora de los Remedios y la Plaza de Andalucía hasta alcanzar la calle Mendizábal, frente al Restaurante El Pájaro.

En este último punto se concentró gran cantidad de personas que animaron a los deportistas y observaron de cerca el paso del grueso de ciclistas que continuó su ruta por la Alameda Solano, un trecho bastante complicado por su estrechez, socavones y curvas obligadas por la referidas obras del tranvía.

Tras cruzar este tramo, el pelotón rebasó la rotonda de la Venta Agustín y subió por la Carretera de El Marquesado hasta traspasar el término municipal de la ciudad en sentido al Barrio Jarana.

Para el paso de los ciclistas, la Policía Local de Chiclana recomendó como vía alternativa la que conecta La Banda con El Lugar a través de la calle Paciano del Barco, Carmen Picazo y El Arenal, sin que se produjeran incidentes de relevancia en el tráfico rodado.

Para hoy lunes queda la tercera etapa, que también pasa por Chiclana.

La Janda

Fue un visto y no visto. El paso de la caravana ciclista por la comarca de la Janda fue todo un espectáculo multicolor del que los vecinos de Zahara de los Atunes, Barbate, Vejer y Conil quisieron participar de lleno echándose a las calles y carreteras cercanas para ver pasar a los primeros escapados de la carrera, al pelotón y los rezagados, que aunque pocos, también los hubo.

Lo que no hubo fueron imágenes en directo en Televisión Española, por lo que las costas de Zahara y Barbate solo saldrán en algún resumen, al igual que la belleza del casco urbano de Vejer, donde se disputaba uno de los sprint del que sacaron buen partido un grupo compuesto por cuatro corredores que tomó una ventaja de varios minutos a la cabeza del pelotón por las calles vejeriegas.

Uno de los recibimientos más efusivos se producía en la plaza de los Reyes Católicos de Barbate, donde los vecinos se arremolinaban sobre la fuente central cuyos chorros de agua fueron cerrados para evitar que se mojase el personal dado el viento de Levante que a esa hora soplaba con cierta intensidad. Muchos de esos vecinos, lucían una camiseta de color naranja, que servía como reivindicación para recuperar los terrenos del Campo de Adiestramiento Militar que la Armada posee en la Sierra del Retín.

En Vejer, la subida de la cuesta de San Miguel con 22 curvas fue una de las primeras pruebas de fuego para los corredores que se salvó sin problemas ante las experimentadas piernas de estos profesionales de la bicicleta. También llamativa fue la bajada de la avenida de Andalucía y su entronque con la avenida de Los Remedios, donde tras la pendiente llegaba una curva muy cerrada y llena de público.

En apenas cinco minutos pasó la Vuelta por cada uno de los pueblos del litoral de la Janda. Los que estuvieron a pie de calle fueron los únicos que la pudieron ver, ya que hasta las cuatro de la tarde no conectó la primera cadena de Televisión Española con la competición, que a esa hora ya atravesaba Chiclana.

Algeciras

Algeciras vivió ayer un domingo especial que nada tiene que ver con su Feria Real aunque durante el mediodía el Llano Amarillo bien parecía el real de la feria en uno de sus días grades. Allí se produjo la salida de la segunda etapa de la Vuelta Ciclista a España, que paseó por las calles de una ciudad volcada en una jornada que concluyó en San Fernando. Un día histórico para el deporte algecireño que lo disfrutaron miles de personas.

No sólo la zona portuaria, punto de partida, concentró a un gran número de aficionados al ciclismo y curiosos. Durante todo el recorrido por Algeciras, no hubo uno sólo de los 9,2 kilómetros del trazado urbano neutralizado que no tuviera público. Y, la gran parte, estuvo abarrotado, formando una cadena humana que se convertía en una ola de decibelios y algarabía cuando pasaban los integrantes de la serpiente multicolor con las estrellas del panorama internacional.

Además, parecía que la Vuelta pasara todos los años por la localidad pues la gente supo concentrarse en los mejores puntos. La salida en la glorieta del Ave María, la rotonda de Paco de Lucía -por donde los ciclistas pasaron dos veces en un homenaje al genial guitarrista-, avenida Carlos Cano, Blas Infante, la salida de Los Pastores y la Fuente del Milenio fueron algunos puntos calientes del prestigioso carrusel.

La fiesta en la ciudad comenzó mucho antes del pistoletazo de salida, con la llegada de la caravana sobre las 11:30. El Llano Amarillo fue un parque de atracciones del ciclismo con niños y mayores arremolinándose entorno a los camiones, las bicicletas, los puestos de promoción, muchos de ellos con degustaciones de comidas y bebidas, las actividades y los deportistas que pasaron por el punto de firmas.

Los integrantes de los equipos ciclistas de la comarca no dudaron en acudir al epicentro de la salida, luciendo orgullosos los maillot de sus conjuntos. Disfrutaron de lo lindo.

Alberto Contador, que donde va se da un baño de masas, fue el más buscado para las fotos o simplemente para reconocerlo mientras daba sus prestigiosas pedaladas. Pero también se escuchaban gritos de ánimo para Purito o Alejandro Valverde. Los españoles, los favoritos.

Algunos aficionados, más selectivos, prefirieron buscar lugares más apartados del centro con mejores vistas y con mejor paisaje ya por Pelayo hacía kilómetros más avanzados de la N-340 dirección a Tarifa.

La segunda etapa de la Vuelta a España 2014 dejó huellas de bicicletas en una entregada Algeciras. Y viceversa.

M. ÁNGELES AMAYA, PEDRO M. ESPINOSA, CARLOS BENJUMEDA, FERNANDO MELERO, JOSÉ MARÍA RUIZ Y FRANCIS MENA

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