Más respuestas para una sociedad vapuleada

Imaginen esta escena, real, ayer por la mañana, en una cafetería de un restaurante de la provincia. Dos señores, cincuentenarios al menos, leen un periódico. No es ninguno deportivo. Leen Diario de Cádiz. A modo de comentarios, en lugar de hablar de los últimos fichajes de uno y otro equipo, salen de sus bocas las siguientes expresiones: "El director del FMI ha dicho que España va peor todavía (...)" . El otro responde: "La deuda está en 4.000 millones" (...) "Los políticos van a acabar fugándose de España".

A continuación, siguen: "Mira, mira, el AVE no llega hasta el 2014", agrega el primer interlocutor. "Y el puente nuevo sigue parado". "Y ahora Visteon, mira, cierra la planta, la de El Puerto de toda la vida, 400 tíos más a la calle. Y sin previo aviso. Qué barbaridad".

Esta conversación deja bien claro que la sociedad gaditana no necesita que la convenzan de nada, sabe muy bien lo que está pasando y lo que está sufriendo. Lo que necesita la sociedad gaditana es que sus representantes, sean políticos o sindicales, le demuestre de forma clara que existe unión, que todos están de acuerdo en decir que hasta aquí se ha llegado.

¿Qué estará pensando un trabajador de Visteon, de Delphi o de Alestis cuando reflexione sobre la inversión multimillonaria que Ford se lleva a Valencia? Por qué esa inversión no ha llegado a la provincia con más paro de España y donde, precisamente, el sector de la automoción ha vuelto a ser golpeado en la cara cuando intentaba levantarse?

Ayer, los sindicatos pedían a los medios ayuda para trasladar a la sociedad esa necesidad de unión. Tal vez no le haga falta el llamamiento. Tal vez sepan, los gaditanos, que el anuncio de cierre de una fábrica como la de Visteon se produce justo el mismo día en el que entra en vigor la nueva reforma laboral, esa que permite el despido con 20 días por año trabajado, en lugar de los 45 habituales (como ocurrió en Delphi).

Y, por último, tal vez la sociedad gaditana sí necesite respuestas, más que petición de ayuda, precisamente, porque gran parte de esa sociedad es la que está sufriendo dramas como este.