"Somos soldados, pero ante todo, ciudadanos"

La Asociación Unificada de Militares Españoles (AUME) nació en el año 2005 con el objetivo de mejorar y participar como asociación en todos los aspectos sociales, laborales y económicos dentro de las Fuerzas Armadas. Esta asociación tiene el apoyo incondicional de la Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUGC), el Sindicato Unificado de Policía (SUP) y CCOO.

Para ello, José Manuel Esnaola y Carlos Ortiz, delegado y vocal respectivamente de AUME en Cádiz desde el 1 de junio de 2012 quieren, como todos los miembros de esta asociación, que se desarrolle con la mayor rapidez posible la Ley de Derechos y Libertades del Militar, promulgada en el año 2011.

Estas propuestas son para la mejora de las Fuerzas Armadas. Dichas propuestas, publicadas en 2010, están divididas en nueve partes siempre mirando al militar como ciudadano: sus derechos, su calidad de vida, salarios "justos", solidaridad, cómo enfrentarse a una discapacidad, también como ciudadanos trabajadores, "ciudadanos seguros, con expectativas y ciudadanos concienciados", explican en la web .

El Ministerio de Defensa conoce de primera mano estas propuestas gracias a las numerosas reuniones que han mantenido con la subsecretaria de Defensa, Irene Domínguez. Sin embargo, el Ministerio no se ha pronunciado públicamente respecto a estas ideas.

Al mismo tiempo, existe un decálogo de prioridades en AUME, en el cual se reivindican el derecho de asociación de todos sus miembros profesionales; la modificación del artículo 44 del Código Penal Militar; la puesta en marcha, con carácter urgente de políticas activas para solucionar la problemática actual de los miembros de las Fuerzas Armadas pertenecientes a Tropa y Marinería y Militares de Complemento; la desaparición de las preconstitucionales Reales Ordenanzas para las Fuerzas Armadas y por último, puesta en marcha de planes concretos y determinados, con financiación suficiente, para atender a la Prevención de Riesgos Laborales y para conciliar la vida profesional con la familiar, entre otras.

Sus comienzos no fueron fáciles porque Jorge Bravo, presidente de AUME, fue detenido en 2007 por manifestarse haciendo uso de su condición militar, teniendo en cuenta que esta acción está prohibida al igual que ningún militar no puede manifestarse vestido con su uniforme. A pesar de ello, la asociación con el paso de los años ha ido cogiendo fuerza y reconocimiento a nivel nacional. Sus afiliados "han aumentado en el último año un 20%, somos más de 4.000 socios ", confirmaron José Manuel Esnaola y Carlos Ortiz.

Por ello, no quieren la neutralidad política y sindical de los militares y reclaman que sigan manifestándose con los funcionarios por los recortes económicos y sociales en España porque ellos, ante todo, son "ciudadanos" y reivindican que las reformas en las Fuerzas Armadas se lleven a cabo lo más pronto posible. De momento, "AUME no tiene previsto manifestaciones por separado, pero no descartan esta posibilidad", declaró a este periódico Jorge Bravo, presidente de AUME.

Actualmente, en el Ministerio de Defensa se está formando un consejo personal para que se reúna con AUME junto con la Asociación Profesional de los Suboficiales de las Fuerzas Armadas (APSFA); Asociación de Tropa Marinería Española (ATME); Asociación de Militares de Tropa y Marinería (AMTM); Asociación de Militares de Complemento de las Fuerzas Armadas (AMCOFAS) y Asociación Unificada de Militares Profesionales de España (AUMPE). Esta reunión está prevista para que se lleva a cabo a mediados de otoño de este año. AUME agradece el esfuerzo de sus compañeros con aportes de ideas, defensa de los cambios que reivindican para una mejora de sus derechos y libertades y que no haya neutralidad en las Fuerzas Armadas.