El transbordo obligado pone en duda la viabilidad de la red metropolitana

Vías del tranvía en la conexión de La Ardila.

Cádiz/"Para justificar la inversión que se está realizando (unos 200 millones de euros) no se puede entender otro escenario que el que el tranvía llegue a Cádiz". Así, con claridad, se expresó en septiembre de 2014 el entonces delegado de Fomento de la Junta en Cádiz Manuel Cárdenas. Dejaba claro algo de lo que ya se era consciente: si el tren metropolitano que se promovía desde la administración regional no tenía la posibilidad de llegar hasta la capital el proyecto nunca sería rentable.

Las piruetas que dio ayer la Junta para explicar cómo va a funcionar la línea entre Chiclana y Cádiz más que tranquilizar lo que han dejado en el aire es la duda sobre la viabilidad de este servicio, planteado por primera vez en 2003, y que acumula por ello años de retraso en su ejecución. La premisa de Cádiz estación término no se va a dar por el momento, según lo anunciado por Fomento.

Expertos en el desarrollo del transporte público destacan lo absurdo que es introducir una parada intermedia a la altura del Río Arillo para que los pasajeros del tranvía, ya sea desde Chiclana como desde San Fernando, esperen al Cercanías de Renfe para completar el recorrido hasta la capital. O viceversa, para quienes salgan desde Cádiz rumbo a Chiclana.

La rapidez del servicio, una de las ventajas del mismo desde que se planteó este proyecto, queda fulminada con este obligado transbordo. La previsión inicial de la Junta era tardar 28 minutos entre Chiclana y Cádiz en el nuevo medio de transporte, algo que va a resultar imposible de cumplir con este cambio de medio de locomoción. Por lo demás, destaca también que para el pasaje procedente de San Fernando puede resultar más ágil utilizar desde el primer momento el Cercanías, evitando así el cambio de vehículo a medio camino.

A todo ello habrá que tener en cuenta el coste del nuevo apeadero y todo lo que ello conlleva: acceso hasta el punto, equipamientos necesarios y una pasarela que parece obligada para que los usuarios puedan cruzar la vía férrea.

Los datos que manejaba la Junta en 2009 era que el metropolitano en esta línea podría transportar a unas 20.000 personas cada día. A ello se le unirían las 10.000 previstas para la línea 2, fundamentalmente entre Cádiz y Puerto Real. Sobre esta última nada se informó ayer, aunque el Ayuntamiento de la capital necesita claridad dada su intención de empezar la urbanización de la avenida de Astilleros lo más pronto posible. Tendrá que saber entonces y debe dejar espacio en esta renovada carretera para el viario del metropolitano.

Demasiadas dudas después de tantos años de espera.

Un tranvía con características para circular por la vía del tren

El tranvía entre Chiclana, San Fernando y Cádiz discurrirá por una vía creada específicamente para su paso, como ocurre entre La Isla y la localidad chiclanera. Discurrirá por tramos urbanos como pasa en ambos municipios. Pero además hará uso de la vía férrea. Eso supone que cuente con unas características específicas, que lo hacen diferente de las unidades que prestan servicio en el centro de Sevilla. "Une las dos modalidades", destacaba ayer la delegada territorial de Fomento, Gema Araujo, que se refería precisamente a que tenía las condiciones de un tren para ir por estructura ferroviaria y de un tranvía para ajustarse a la plataforma construida en Chiclana y San Fernando, ciudad por la que cruzará en todo su centro. "Es más grande que el de Sevilla", matizó.