Bach y Beethoven suenan en la Navidad del Teatro Falla de Cádiz
Música en Cádiz
La Coral de la UCA y la Orquesta Beigbeder volverán a protagonizar, el próximo sábado 16, el concierto extraordinario de diciembre en el escenario gaditano
La pianista gaditana Carla Román estará de nuevo en el escenario para este concierto
La zarzuela, protagonista de la última actuación
Otra presencia de la Coral en el Falla
Cádiz/La temporada de otoño del Gran Teatro Falla acabará el próximo sábado, 16 de diciembre, con el tradicional Concierto de Navidad, una cita que volverá a tener sobre el escenario a los mismos protagonistas que en años anteriores: la Coral de la Universidad de Cádiz (UCA) y la Orquesta Álvarez-Beigbeder con obras de Beethoven y Bach. Bajo la dirección, de nuevo, de Juan Manuel Pérez Madueño, junto a las dos formaciones estarán la joven pianista Carla Román y las voces de Lucía Millán, soprano; María Ogueta, contralto; Manuel de Diego, tenor, y Andrés Merino, barítono. Completan el elenco solista dos voces de la propia Coral: Gloria Cano, contralto, y Guillermo García, barítono. Para el concierto, que comenzará a las 20.00 horas, quedan aún algunas entradas sueltas.
La 5º Sinfonía y la Fantasía coral, de Beethoven, y el Magníficat, de Bach, integran el programa del Concierto de Navidad de este año en el Falla. Como ocurrirá el próximo sábado sobre las tablas del coliseo gaditano, también en estas líneas es la batuta de Pérez Madueño la que explica el significado y la intención de las piezas a interpretar.
“La 5ª Sinfonía es, quizás, el ejemplo más notable de la conexión entre la música instrumental y el reino de las ideas. Es un verdadero reto para cualquier orquesta, no solo por la gigantesca formula compositiva con la que Beethoven edifica esta obra, sino por la lectura trascendental que requiere de sus ejecutantes para encontrar y mostrar ese reino fuera de la propia música que lo conduce”.
Y continúa el director de la coral y del espectáculo: “La Fantasía coral es el primer intento de Beethoven por proclamar la subyugación del texto al tremendo poder de la música. En ella podemos encontrar una fantasía con cinco actos donde el piano tiene un papel destacadísimo, y en el que podemos encontrar rasgos casi personales del propio Beethoven. Producto de esta idea es la reafirmación que hace el propio compositor en su universal 9ª Sinfonía”. Será aquí donde intervenga la gaditana Carla Román.
“Finalmente -continúa Pérez Madueño-, el Magníficat de Bach como antítesis del mensaje de belleza a través de la sublimación de la música que ejerce Beethoven, y discurre entre el discurso formal de la forma barroca y la retórica que persigue situar al texto en un lugar de dominancia”.
A modo de resumen, Juan Manuel Pérez contrapone, y también acerca, las obras y a sus autores: “Ambos mensajes, el de Bach con el Magníficat y el de Beethoven con la Fantasía, coinciden en mostrar dos páginas imponentes de la composición musical tomando direcciones totalmente opuestas en cuanto al tratamiento de los textos, aunque con un mismo resultado: una música sublime imposible de concebir salvo en la mente de estos dos grandes genios”.
La magnitud de las obras a interpretar y el nombre de los autores que las firmaron no hacen sino confirmar el “esfuerzo” de la coral gaditana y y la orquesta jerezana por tratar de estar a la altura de un reto que el director asume con responsabilidad pero, también, con cierta naturalidad: “Aquí es donde encontramos la labor de acercamiento de la coral en favor de la música. Una labor que se inicia con el propio aprendizaje de las piezas, con el conocimiento de su lógica, de sus razones, de su sentido. Todo este camino, imposible de apreciar en otras circunstancias, no hace más que aumentar la voluntad por interpretar obras de este tamaño. Un reto continuo”.
La orquesta Beigbeder se enfrenta también a “un desafío de un nivel casi extenuante no solo en el aspecto mental, sino puramente físico”, como Pérez Madueño: “Las sesiones de trabajo han llevado al límite a un conjunto que ha vivido una experiencia similar a aquella que vivirían los músicos que, en 1808, estrenaron en un mismo concierto la 5ª y 6ª Sinfonía y la Fantasía coral, con el propio Beethoven al piano en la que fue su última interpretación pública como consecuencia de su avanzada sordera”.
Este trabajo, finaliza el director, sería “imposible de concebir” sin la acción de la Coral de la UCA: “Es verdaderamente increíble encontrar palabras para reconocer la labor que cada uno de sus integrantes desarrolla dentro de la institución”.
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