Una Feria del Libro que necesita visibilidad

No sorprende a ninguno de los implicados. La Feria del Libro de este año ha sufrido un descenso de unas mil personas respecto a la pasada edición. El evento parece sufrir de hemofilia. Ya el año pasado, la cita en el Baluarte de Candelaria presentaba una hemorragia de 1.580 personas menos respecto a 2010, pasando de los 8.439 visitantes de hace dos años a los 6.859 visitantes de 2011. Este año, la cifra apenas supera las cinco mil visitas.

Un dato que, según lo que han podido ver durante las jornadas de la cita en el Baluarte, no ha extrañado a sus participantes: en general, los libreros comentan que ha sido notorio el descenso de visitantes aunque, en algunos casos, las cifras de ventas han sido superiores a las de pasadas ediciones.

Lo cierto es que la Feria del Libro experimenta una sangría de público que, más que a elementos externos -el concejal delegado de Cultura, Antonio Castillo, culpaba ya el año pasado a las condiciones meterológicas adversas y a la crisis- habría que achacar a males casi endémicos del encuentro, como el aislamiento o la poca difusión. Elementos que se han señalado en numerosas ocasiones y a los que no se ha prestado atención ni solución.

Sin embargo, vistas las cifras de este año y asumiendo que el formato de la Feria del Libro no termina de funcionar, los implicados en el encuentro se reunirarán próximamente en comisión para analizar la situación, desarrollar críticas y sugerencias y presentar propuestas.

· JUAN MANUEL FERNÁNDEZ

LIBRERIA MANUEL DE FALLA

"Viendo las cifras de otras ediciones , no esperábamos una asistencia masiva"

"A excepción del primer domingo, que hubo muchísima gente, el resto de los días la afluencia de público ha sido algo baja -comenta Juan Manuel Fernández, de la librería Manuel de Falla, uno de los veteranos de la cita-. Pero viendo cómo en los últimos años se había ido moviendo la cosa, tampoco es que esperáramos una afluencia masiva, así que el pinchazo no nos sorprende mucho".

"Por eso tenemos previsto organizar una reunión de comisión de la Feria del Libro, en la que queremos revisar qué estamos haciendo o qué podríamos hacer para atraer más público, de manera que nos sintamos satisfechos con la afluencia, que es siempre lo que se pretende cuando se organiza algo así, que acuda mucha gente", prosigue el responsable de la Manuel de Falla.

Respecto a ventas de este año, el librero señala un repunte respecto a la pasada edición, "algo que hemos podido ver no sólo nosotros, sino también otros libreros que han acudido a las casamatas". Según indica Juan Manuel Fernández, este año, el pódium de autores más vendidos ha estado ocupado por Eduardo Mendoza y su El enredo de la bolsa y la vida; Jesús Maeso con En una tierra libre y Almudena Grandes con El lector de Julio Verne.

"Álvaro Pombo también funcionó muy en su presentación -señala-, además de una gran variedad de autores gaditanos: Juan Manuel Serrano Cueto, por ejemplo, que ya va por la tercera edición de El Cádiz oculto; o la última edición de El Cádiz de las Cortes, de Ramón Solís, a cargo de Sílex, que es una edición preciosa y a muy buen precio. También hemos vendido bien El caso de Casas Viejas, de vuestro compañero Tano Ramos, o los títulos sobre Cádiz de Julio Molina Font".

"Sin embargo, yo diría que este año el público ha sido algo más diverso, más heterogéneo a la hora de comprar -prosigue Juan Manuel-. Aunque las estrellas suelen ser la narrativa y los libros sobre Cádiz, que es lo que más se vende siempre en general, este año el público ha solicitado todo tipo de autores y temáticas".

· AUXILIDORA RAPOSO

LAS LIBRERAS

"Hace falta poner a trabajar la imaginación y discurrir cómo atraer a la gente"

Desde Las Libreras, Auxi Raposo comenta un evidente descenso de público en la última edición de la Feria del Libro. Y, aunque admite que la climatología "también ha influido", para la librera está claro que la cita en el Baluarte necesita "más publicidad". Por eso espera que en la futura reunión entre responsables y participates "se aporten nuevas ideas": "Si no hay dinero, está claro que no se invierte -reflexiona Raposo-. Pero es también importante poner a trabajar la imaginación y discurrir algo para que la historia suene y la gente se anime a ir. Tal vez si se pudiera abrir por las mañanas, ampliar las invitaciones a los colegios, organizar actos dentro y fuera del recinto...", sugiere.

Entre los títulos más vendidos, Auxi Raposo comenta Mil cosas que no te dije antes de perderte, de Benito Olmo, además de Un paseo por la gastronomía y el paisaje de Cádiz, de Carlos Spínola, Julio de la Torre y Manuel Fernández Trujillo, y un libro infantil: 75 consejos para sobrevivir al colegio. "Los dos cómics del Doce que se presentaron, Viva La Pepa y Tertulias y Cortes, también funcionaron muy bien -explica-. Y el siguiente fue también otro libro de temas gaditanos, la Historia de las Torres Mirador que ha editado Torre Tavira".

· DINA EL GHOULBZOURI

LIBRERÍA ALEJANDRÍA

"El Baluarte es muy bonito pero hay que hacer algo para atraer a la gente hasta allí"

En su segundo año consecutivo participando en la Feria del Libro, la librería gaditana Alejandría ha mejorado "levemente" su volumen de ventas aunque su regente, Dina El Ghoulbzouri, detecta una serie de "carencias" en la cita que se celebra en el Baluarte de la Candelaria, un lugar que considera "muy bonito" aunque opina que "hay que hacer algo para atraer a la gente hasta allí".

Para El Ghoulbzouri una feria del libro se debe centrar "en captar la atención de las personas no lectoras". "Los lectores, mis clientes por ejemplo, sabían dónde estábamos y, de hecho, sabían que tienen una oferta del 10% de rebaja con respecto a la librería, así que han venido todos. Pero yo creo que lo importante es que la gente que habitualmente no compran libros se encuentre con la feria y así se podrán animar", valora.

La librera también asegura que "la climatología no acompañó del todo" y que "habría también que hacer algo con los horarios". A juicio de Dina, la Feria del Libro necesita de "más intensidad" de actividades. "Si estar más horas en el stand significa mayores ventas, nosotros estaríamos dispuestos a estar más tiempo", asegura la empresaria aunque se queja de "la poca difusión" que tiene este evento en la ciudad. "Aunque estés más horas si la gente no sabe que se está celebrando la Feria del Libro pues es absurdo", valora.

En cuanto a las ventas concretas del stand de Alejandría, Dina informa que "lo que más se ha llevado la gente son libros infantiles". Álbumes ilustrados y series de aventuras como las de Gerónimo Stilton, que visitó la Feria el primer sábado, han sido el objeto de deseo de buena parte de la clientela. "Y también libros de ensayos políticos y de economía. La crisis está de moda", bromea.

· PEDRO RIVERA

QUORUM, QUËNTUM Y QIQ

"Nuestras ventas han descendido un 10% con respecto al año pasado"

"¿La Feria? La Feria, en general, bastante más floja que el año pasado". Era la impresión de Pepe Jaime de las librerías Quorum, Qüentum y QiQ. Impresiones que fueron refrendadas por los números que ofrecía su socio, Pedro Rivera, que realizaba ayer el balance de lo que ha dado de sí la Feria del Libro de Cádiz para la empresa de libreros. "Pues sí, ha sido más floja. Nuestras ventas han descendido un 10%, más o menos, con respecto a la feria del año pasado", confirmaba.

La crisis, el clima, la escasa difusión... "Todos esos factores creo que se han mezclado", repasa el librero que recuerda el "nefasto" primer sábado de Feria con la lluvia y viento incesante de la mañana. "La promoción creo que también ha sido muy mala", valora, "ya que la cartelería estuvo lista solo un día antes de empezar la feria". Sin embargo, Pedro Rivera opina que la ubicación, en el Baluarte de la Candelaria, "es ideal y digna para la Feria del Libro de Cádiz" aunque cree que se debería de proporcionar "un mayor número de actividades y un servicio de hostelería" con la idea de que los clientes se queden durante más tiempo en el enclave gaditano.

En cuanto a los títulos más vendidos, Pedro Rivera ve un cambio con respecto a la pasada edición . "La bibliografía en esta ocasión ha sido bastante más variada", asegura.