La Fundación Ory profundiza en las relaciones entre poesía y arquitectura

Dos espejos donde la ciudad se mira. Dos espejos donde el imaginario colectivo se refleja. Pero, también, dos espejos que, colocados uno frente a otro, dialogan, se llaman, se cuentan. Poesía y arquitectura, dos disciplinas que la Fundación Carlos Edmundo de Ory pone en el punto de mira con un nuevo ciclo de conferencias que comienza esta tarde en el centro cultural Reina Sofía.

Según explica el escritor Javier Vela, gestor de proyectos de la Fundación, el ciclo Poesía y Arquitectura trata de "reflexionar sobre la propia relación de afinidad estructural existente entre ambos discursos, pero también sobre la representación literaria de la ciudad y del espacio arquitectónico y sobre las transformaciones del referente urbano en objeto de mímesis e interpretación artística".

De esta manera, la entidad que cumple su segundo mes de vida "efectiva" articula cuatro actividades, en colaboración con el Colegio de Arquitectos, que se celebrarán durante los martes de julio a las ocho de la tarde. Dos conferencias y dos coloquios. Abre la veda el poeta y musicólogo José Ramón Ripoll con Lorca: Nueva York en un poeta mientras que Ana Sofía Pérez-Bustamante hablará de la Roma de Alberti el martes 16. Los arquitectos Alberto Campo Baeza y Tomás Carranza inaugurarán los coloquios el 23 de julio y el urbanista José Manuel Vera Borja y el arquitecto y decano del Colegio, Víctor Gómez, cerrarán el ciclo el día 30.

Estas citas abarcarán las diferentes conexiones entre las dos disciplinas además de "multitud de temas adyacentes", advierte Vela que precisa algunos de los ejes como "la naturaleza cambiante del paisaje urbano y la imagen del mismo que el arte y los artistas proyectan en la conciencia colectiva". "Se trata -prosigue- de ofrecer a los asistentes una mirada lírica sobre la evolución de la poesía y la arquitectura y de ponderar, como apunta Campo Baeza, la condición esencial de esta última en relación a la naturaleza sintética del discurso poético".

Como manifiesta el escritor, desde la Fundación Ory -radicada en el centro cultural Reina Sofía de la Fundación Municipal de Cultura- se pensó que "emprender este proyecto con el Colegio de Arquitectos era lo más oportuno" y su decano, Víctor Gómez González, "un hombre comprometido con la ciudad y la cultura" ofreció "todo su apoyo al instante".

Esta nueva iniciativa aspira a seguir la estela del éxito de Lectores de película: el placer de la lectura a través del cine que "consiguió concitar en cada una de sus sesiones a un numeroso público interesado no sólo en el fenómeno literario sino también en el modo en que esta había sido tratada a través del discurso fílmico", asegura el programador.

Este ciclo ya cerrado también buscó la colaboración de otros agentes culturales de la ciudad como la Asociación de Personas Lectoras y los clubs de lectura de la Biblioteca Provincial de Cádiz y las librerías de la ciudad. "La vocación cooperativa está en el eje de todo lo que hacemos. "El narcisismo empaña los espejos", dejó escrito Ory. Por eso, nuestras actividades intentan proyectarse más allá de la propia Fundación, hacia otros públicos y ámbitos de conocimiento", argumenta Javier Vela que adelanta que "muy pronto" llegarán nuevas colaboraciones. En la próxima ocasión, con el Festival JazzCádiz, que promueve la asociación Qultura.