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Exposición
Las grandes ciudades del pintor gaditanoRicardo Galán Urréjola regresan a una de sus ciudades más queridas, Cádiz, con una exposición en la Galería Benot. La sala de referencia para el autor y con la que ha mantenido una estrecha y larga relación personal y profesional acoge una muestra de todas estas grandes urbes por la que es tan reconocido, y que le han llevado durante estos años atrás a trabajar para varias galerías de importantes capitales europeas.
Ahora regresa a su Cádiz y a su Benot, "que fue la primera galería donde expuse individualmente y a la que tengo un especial cariño" con un total de 23 obras, tras exponer sus paisajes más abstractos en el Castillo de Santa Catalina, en el que se convirtió en el regreso del pintor de la Isla a la ciudad. En su nueva propuesta, elaborada expresamente para la sala gaditana, mantiene un hilo conductor en el que establece una acción comparativa entre distintas ciudades, "todas con sus singularidades y al mismo tiempo con nexos comunes estéticos y emotivos", explica el autor. En este sentido, el pintor de las grandes urbes del mundo se recrea en "el bullicio que proporciona un escenario incomparable para la creatividad artística". Y lo hace reflejando esas grandes avenidas, autobuses, semáforos, edificios y personajes anónimos "que pueden convertirse en una verdad original y afortunada que trascienda lo cotidiano", explica.
La exposición Grandes ciudades también recoge la vitalidad de todas estas ciudades tan distintas, pero iguales en algunos puntos. Un total de seis ciudades se entremezclan en esta muestra de paisaje urbano entre las que figuran Nueva York, Ámsterdam, Londres, París, Madrid y unas tres piezas de Cádiz. Un muestrario urbano que se convierte en centro de su interés como observatorio artístico y que aporta al autor el contenido propicio para dar riendas a su creatividad.
Algunas son enormes metrópolis, otras parecen de un formato más contenido, pero todas mantienen el pulso rítmico y emocionante del día a día. "Son ciudades que resultan cercanas, conocidas casi siempre de una u otra manera y que nos trasladan a escenarios en los que podemos tener la impresión de sentirnos acogidos".
Ciudades en las que se pueden ver la evolución pictórica de su creador a través de una gran variedad de matices, perspectivas, muchas de ellas difíciles, "como las aéreas de Manhattan", con una obra más redonda, compleja y trabajada, también desde el punto de vista cromático.
En estas creaciones se utiliza la luz como vehículo expresivo, "una luz que no responde a la veracidad de una determinada hora o estación, sino más bien a una disposición que tendría alguna relación con una estudiada escenografía". Luz estática, intemporal y dominadora, asociada al color de forma conveniente "en pos de un resultado que tiene la visión del cuadro y el acto pictórico como último objetivo".
Con un pie en la exposición que se inaugura este viernes, 14 de octubre y que puede verse hasta el 28 de diciembre, Galán Urréjola cuenta que ya está inmerso en el trabajo de dos nuevas exposiciones en Burdeos, Francia y para la galería Ansorena de Madrid.
Un especial reencuentro que certifica su amor por esta tierra y su sala Benot, su casa, para seguir mostrando las alas artísticas que lo llevan por el resto de España y el mundo.
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