Localizan el primer barco que Drake hundió en Cádiz

arqueología subacuática

Se trata del 'San Jorge y San Telmo', el nombre del pecio Delta 2 que se halló en las obras de la nueva terminal de contenedores en 2012

Cuba con elementos del cargamento del Delta 1 y 2 que fue presentado en 2012 en el CAS. / Lourdes De Vicente
Virginia León

26 de junio 2018 - 08:11

Cádiz/Cuando Felipe II estaba engrandeciendo su flota en las costas gaditanas para para atacar Inglaterra en nombre de la gran Armada Invencible, el corsario Francis Drake recibió la orden de Isabel I de Inglaterra de atacar Cádiz. Fue cuando en abril de 1587 este temido pirata que más bien era un mercenario emprendió esta expedición sobre la ciudad, en cuya bahía entró maliciosamente con bandera francesa y flamenca, que rápidamente sustituyó para combatir a los navíos aquí atracados. Abrió fuego y hundió una veintena de navíos -según fuentes nacionales pues según las inglesas se cargaron 33-, y el primero en caer fue el denominado 'San Jorge y San Telmo', nada menos que el denominado Delta 2 que fue localizado en las obras de la nueva terminal de contenedores del puerto de Cádiz, que lleva a cabo la Autoridad Portuaria, tal y como adelantó este lunes la Cadena Ser.

Milagros Alzaga García, técnico del Centro de Arqueología Subacuática (CAS), continuó la investigación al hilo de sus tesis junto a los investigadores de la empresa Tanit -Mercedes Gallardo y José Manuel Higueras-, Genoveva Enríquez y los italianos Renato Gianni y Fabrizio Ciacchella. Juntos han logrado la difícil proeza de bautizar a aquel pecio, cuya flamante carga se presentó en 2012 junto a la del Delta 1 en las instalaciones del CAS por parte de la Junta de Andalucía y Autoridad Portuaria, y que ahora se sabe que pertenece a la primera embarcación genovesa que tocó fondo y que cargaba con grandes riquezas, tal y como recogen las fuentes documentales. "La documentación indica que el primer barco que se hundió fue un barco genovés".

El corsario recibió la orden de atacar la flota que Felipe II estaba fortaleciendo en Cádiz

Un navío que antes de hundirse atacó para defenderse, según ha podido comprobar este equipo de investigación hispano-italiano, "ya que uno de los dos cañones que estaba en uso no tenía bala, algo que no era usual pues estaban preparados ante un posible ataque". Los otros cinco, añade Milagros Alzaga, estaban estibados en la bodega con el fin de engrosar la Armada Invencible, tal y como recogen las fuentes documentales. Completaba su botín barriles de grana cochinilla que se estudió en la Universidad de la Laguna "que era usada para tintes y era de los materiales más cotizados procedentes de América"; botijos -algunos de ellos cerrados con aceitunas en salmulera- "que al ser un alimento andaluz indica que ya se había hecho la carga en Cádiz"; cajas de madera con frutos; madera tropical; anclas; compases de navegación; elementos de cuero, pipas de caolín, etc.

Este buque mercante con carga andaluza y de América circunscrito a una ruta europea que partía rumbo a Italia era el navío 'San Jorge y San Telmo', propiedad de la familia Vasallo, cuyo nombre localizaron buceando en una obra de cinco tomos que atesora el Archivo de Simancas: La batalla del mar océano, al que llegaron tras investigar cada detalle de la estructura de este navío con 24 metros de eslora y 8 de manga, su ubicación y su bondadoso cargamento con artillería italiana.

"La primera vez que vi el nombre fue emocionante. Lo encontré de noche y apenas dormí", explica la investigadora. Y es que "muchas veces no se consigue nominar al pecio, por lo que resulta muy interesante. Esto hace que aún forme más parte de la historia, porque tiene por contar todo cuanto aparece en los archivos del navío y de Drake, incluida la información oficial", añade Carmen García Rivera, directora del CAS.

Entre los elementos que llamaron la atención del equipo figuraba "la carlinga, que es la zona donde se coloca el palo mayor del barco, que indicaba que era una construcción típica mediterránea del XVI, y que tenía paralelos en otro barco que apareció en Cádiz de la familia Lomellini". También estudiaron la artillería -con siete cañones de bronce fabricados en Génova y otro de hierro-, que cuenta asimismo con un paralelo "en el castillo de la Mota en San Sebastián, procedente de una de las naos de la Armada Invencible".

La ubicación exacta del Delta 2 también ha sido crucial para ir cercando esta investigación, explica Milagros Alzaga, que era justo en la entrada frente al muelle de la ciudad. "Un croquis realizado por el segundo de Drake señalaba que era en la misma zona donde se encontró el pecio, apareciendo grandes embarcaciones junto a otras pequeñas, que eran las que cargaban y descargaban".

Precisamente, la documentación asevera que el barco "estaba cargando y descargando, listo para salir, tras lo que había tenido un ataque inesperado". Datos que encajan con la descripción del 'San Jorge y San Telmo', y que se completan históricamente con las cartas localizadas en los archivos en las que "Clemente, el capitán del barco, escribió a Felipe II solicitando el pago por haber extraído unos ocho cañones hundidos de este barco". En enero de 1588 el Rey escribió al Duque de Medina Sidonia para que solventara esta deuda. También da cuentas de aquella batalla el dueño de la embarcación, que en otra carta al Rey escribió "que siempre ha servido muy bien a su majestad, como cuando le ordenó que llevara desde Cartagena los cañones a Cádiz y tras lo que le hundieron el barco".

Probablemente se referiría a estos cañones que hoy han permitido localizar el primer barco que Drake hundió en Cádiz, que en su mayoría están depositados en el Museo de Cádiz junto a otros elementos de la rica carga que portaba, mientras que "otros dos se están terminando de estabilizar en el CAS".

Una investigación, explica Carmen García Rivera, que "ha venido a demostrar que la protección jurídica del patrimonio arqueológico subacuático que se hizo desde la propia Consejería de Cultura con la figura de zona de servidumbre arqueológica -donde no se conocen restos pero se presupone que puede haberlos- estaba más que justificada, como ha podido comprobarse en las obras de la terminal de contenedores".

Una herramienta, esta protección en la que la Junta fue pionera, "que ha sido incluida en 2017 en el registro de las buenas prácticas en el patrimonio de la Unesco".

Así, bajo un discurso "que no impide que se realicen obras importantes para el desarrollo de la ciudad, sino hacerlas compatibles" ha emergido de nuestros fondos este capítulo de la historia que firmó aquella fatídica expedición sobre Cádiz en 1587, que antes de ser el 'San Jorge y San Telmo' fue el Delta 2. Previamente apareció el pecio Delta 1, un buque militar español del siglo XVII, con materiales diversos asociados al mismo: 27 cañones de hierro, 22 lingotes de plata, un astrolabio, cerámica variada, compases de navegación, elementos de cuero como suelas de zapatos y restos óseos de animales. El denominado Delta 3, que apareció a posteriori, se trataba de un buque de nacionalidad holandesa, de tipo mercante y perteneciente a la segunda mitad del siglo XVII.

El CAS trabajará en yacimientos en la Caleta

Dentro del Proyecto Caleta en el que participan el CAS y la UCA, se están realizando actuaciones en esta zona, "en las que se están recopilando toda la documentación desde el punto de vista arqueológico como la evolución del propio paisaje", explica Carmen García Rivera, directora del CAS. Trabajos que concluirán en 2019 con pequeños sondeos en yacimientos de la zona para "obtener más información de los que conocemos y de otros que sabemos que existen pero no tenemos ubicación". También se realizarán inmersiones en Rota al hilo de la Operación Verso, donde se incautaron piezas arqueológicas "que han proporcionado información de posibles yacimentos, gracias a la colaboracón de la Consejería, el Servicio Marítimo, la Guardia Civil y el CAS".

No hay comentarios
Ver los Comentarios

También te puede interesar

Lo último