Sarcófagos 'made in' el Museo

En papel o en fotografía. Cualquiera de las dos opciones fueron válidas ayer para perpetuar en la memoria de los estudiantes un día con el sarcófago antropoide fenicio masculino, de cuyo hallazgo en los terrenos de Punta de Vaca -en la zona de Astilleros- se cumplían ayer 125 años.

"Pero no tiene 125 años, sino aproximadamente unos 2.500", precisaba ayer ante los alumnos del IES Sierra de Lijar de Olvera la delegada provincial de Cultura, Yolanda Peinado, entre otros detalles de su acompañante la dama fenicia, segundos antes de comenzar el taller Construye tu sarcófago.

A los pies de la pareja más emblemática que atesora la pinacoteca provincial se acomodaron 25 de los 50 alumnos que llegaron de este instituto con edades comprendidas entre los 12 y 16 años -de 1º a 4º de Secundaria- para manufacturar en papel su propio recuerdo del hallazgo made in el Museo. Lo hicieron bajo la técnica japonesa del origami, a partir de un pequeño trozo de papel que en cuestión de minutos plegaron hasta convertirlo en sarcófago.

Una instructora fue marcándoles los pasos a seguir, antes de terminar de moldear entre sus manos su insigne y vulnerable contorno. "Ahora os falta dibujar su rostro y brazos", les guiaba mientras repartía unos lápices y bolígrafos. La técnica se antojaba de lo más sencilla y a ellos les entusiasmó. "Mira qué guapo me ha quedado", decía uno de los alumnos más rápidos en desplegar sus destrezas artísticas. De una y veinticinco maneras recogieron en papel -y sin más apoyo que el suelo- los rasgos de su cara y los rizados cabellos del fenicio barbudo, cuyo bucles fueron exquisitamente labrados cientos de años atrás.

Manuel García, Rocío Gómez, Ana Galán o Ana Pérez son algunos de los alumnos que con sus trazos se empeñaban construir el más perfecto de los sarcófagos.

Al dibujo de la cara siguió la improvisada silueta de los brazos, moldeados en bajorrelieve en Fenicia, desde donde fue importado, y ahora dibujados tras las aclaraciones de lo que en ellos aparecieron en su día. "En su brazo izquierdo parecía llevar una manzana, que era símbolo de la eternidad, y en el derecho, una rama de laurel", que encumbraba en el poder a aquellos que lo portaban más allá de la muerte, explicaba la técnico del Museo de Cádiz. Por ello hoy sabemos de la relevancia que tuvo el fenicio en esta caja enterrado.

Un audiovisual realizado entre los técnicos del Museo y los del Gabinete de Bellas Artes de Cádiz, completaba ante los alumnos toda la información de un hallazgo sin precedentes en la historia de la arqueología gaditana y peninsular. Aunque pocos se atrevieron a desgranar la lección aprendida. "Me ha gustado mucho la parte que explica cómo se hicieron los pies", decía, entusiasmada, Ana Pérez. El resto se decantaba por su pequeño sarcófago de papel. "Es lo que más me ha gustado, me ha quedado muy bien", comentó acto seguido Manuel.

Pero no era éste el único recuerdo que podían llevarse del solemne hallazgo de mármol, sino que podían quedar inmortalizados con sus propias cámaras tras la figura en cartón de un sarcófago casero al que podían ponerle su propia cara.

Una oportunidad abierta a todos cuantos ayer pasaron por el Museo de Cádiz -entre los que también figuraron los alumnos de 8 y 9 años del colegio Ramón Crossa de Ubrique-, y donde también se puso en marcha una visita guiada, a partir de las 18.00 horas, con el fin de descubrir los secretos mejor guardados del sarcófago antropoide fenicio masculino. Feliz cumpleaños.