Tito Valencia
La sanidad está mejor que antes
Rocío Bazán. Cantaora
Sentada en un palco del Gran Teatro Falla pensó para ella: "Qué bonito sería cantar con ellos. Qué suerte tendría si pudiera..." Acababa de concluir su recital Cantos de España en el Palacio de Congresos y la invitaron a seguir el Festival de Música Española en el que participaba pero desde el coliseo gaditano. Tocaba la Orquesta Filarmónica de Málaga. Y quedó embelesada por la elegancia y fuerza de sus interpretaciones. Hoy, un año después, la cantaora Rocío Bazan (Estepona, 1977) cumple su deseo prendido en este festival que esta noche alza el telón con su actuación con el conjunto malagueño.
-Es la primera vez que trabaja con esta Filarmónica, ¿qué opinión le merece?
-Para mí es un honor y un placer porque estoy bastante emocionada. Y no es para menos porque es la primera vez que canto con ellos y lo haré en este festival, en el que tan bien me sentí el año pasado, en el Teatro Falla en su centenario y nada menos que cantando El amor brujo de Falla. Así que tengo buenas razones para estar satisfecha. Además, y no lo digo porque vaya a cantar con ellos o porque sea malagueña, la Filarmónica de Málaga es una de las mejores que hay en España y tiene como director titular a Edmon Colomer, un gran maestro con el que ya he trabajado anteriormente tanto con la Orquesta Nacional de Andorra y con la de las Islas de Menorca.
-¿Cómo se siente una flamenca trabajando con una orquesta? Veo que le gusta.
-Esta misma mañana estaba hablando con el director de esto mismo. Él me decía que para hacer música no hace falta partituar, sino que el sentimiento y el corazón ponen en el hilo conductor de la música. Por eso yo me siento bien, porque el flamenco viene de ese sentimiento y de ese corazón que te pone en tu sitio. Y ¿cómo hago yo?... Pues no te sabría decir... Yo intento hacerlo lo mejor posible y entonces ocurre que todo empieza a coincidir , que todo queda unido y compacto, la música de ellos y la mía, mi voz, y todo queda unido.
-Pero, al fin y al cabo, hay una partitura, supongo que eso quita libertad a la hora de interpretar.
-Lo que ocurre con la partitura es que se nota todo. No puedes entrar antes ni después porque aquí, es verdad, que todos los compases están medidos y todo está en su sitio. No se admiten errores ni equivocaciones. Es diferente porque en una bulería o en una seguiriya tú puedes esperar para entrar o salir antes o después. Eso te crea una responsabilidad muy grande pero bueno... Una vez que una entra entrega todo lo que tiene, todo se queda en una pieza, porque tanto los clásicos como flamencos, en este caso yo, intentamos esforzarnos para encontrar esa compenetración.
-Hábleme del programa.
-La obra que va a poder disfrutar el público es El amor brujo de Falla que, como sabes, tiene varias versiones y nosotros vamos a hacer la de 1925. Aunque no tengo un personaje realmente si se podría decir que soy Candela, el personaje de la cantaora, claro (ríe). Tengo que decirte que esta pieza me llega mucho porque la música de este compositor gaditano, que no pega que yo venga a contar qué hizo y cómo lo hizo porque eso lo saben ustedes, es cada vez más interesante para las orquestas que cada vez interpretan más tanto el mismo El amor brujo como sus Canciones Populares. Y, además, estoy completamente segura que El amor brujo es para una flamenca. Cuando Falla compuso esta obra lo hizo pensando en una flamenca tanto por la misma flamencura de arrastra la obra como a la hora de cantarla porque se adapta perfectamente a la tesitura flamenca.
-¿En qué partes de este 'Amor Brujo' se siente mejor?
-Pues a mí me gusta muchísimo la Canción del amor dolido. Creo que me quedo con ella, que es preciosa. Aunque también la Canción de fuego fatuo o el Romance del pescador son muy muy bonitas. También recomiendo la primera parte de la actuación en la que la Filarmónica tocará sola -obras de N. Núñez, I. Albéniz, M. Ravel- porque El amor brujo, con mi participación, lo hacemos en la segunda mitad, me parece.
-Proyectos que tiene en cartera.
-Estoy con el circuito de ocho provincias de la Confederación de peñas flamencas de Andalucía; también estoy participando con El Indiano, de David Morales, en el Teatro Lara de Madrid; ahora para primeros de año actúo dentro de un ciclo de conferencias en el Museo Picasso; están también mis actuaciones habituales con los villancicos flamencos en Navidad y un proyecto que es el que más quebraderos de cabeza me va a dar y el que más ilusión tengo que es la grabación de mi disco a primeros de año.
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