Las Pléyades son nueve
Mapa de Músicas | Susana Gómez Vázquez. Pianista
La pianista madrileña Susana Gómez Vázquez hace en su segundo disco un recorrido por compositoras de tres siglos

Susana Gómez Vázquez (Alcalá de Henares, 1995) me habla por teléfono desde su casa de Alcalá con la espontaneidad y el ardor de la juventud. Pese a ello, la noto muy responsabilizada con la preparación de sus próximos conciertos, que incluye una actuación con la Sinfónica de Castilla y León. A la vez, no puede ocultar su ilusión con la promoción de su último disco, el segundo de su carrera, como el primero, publicado por el exquisito sello madrileño Eudora. Son dos álbumes que eluden las integrales y las grandes formas, y se acercan a piezas breves de un nutrido grupo de compositores, en el caso de Sisters of the Moon, compositoras, pues todas son mujeres.
–¿Quiénes son estas hermanas de la luna?
–Son las Pléyades, ese grupo de estrellas de la constelación de Orión. Según la mitología griega, llegaron allí convertidas en palomas de la mano de Zeus, huyendo del cazador Orión. Eran también las madres del universo, ninfas del cortejo de Artemisa entregadas al amor, algo que en teoría tenían vedado. A mí me interesa mucho la mitología antigua y me pareció una figura preciosa que metafóricamente las Pléyades pudieran encarnarse en la música de estas compositoras, porque muchas de ellas también fueron madres o maestras de muchos otros compositores, como Hélène de Montgeroult o Nadia Boulanger. Además la idea del álbum gira en torno a todos esos instantes del día en el que se pueden vislumbrar las estrellas, como la noche, el amanecer, el atardecer. Y también hay obras relacionadas con el baile y con el amor, todas las facetas de estas Pléyades...
–Pero las Pléyades eran siete y usted toca aquí música de nueve mujeres.
–Sí, se me fue la mano [risas] y añadí dos estrellas, y ojalá pudiera añadir muchas más, porque son infinitas las estrellas de las compositoras. De adolescente empecé a escuchar música de algunas que no entendía porque no se tocaban más. Ahora lo hago yo.
–Me llama la atención poder escuchar una obra de Alicia de Larrocha. Su faceta de compositora es por completo desconocida.
–Han quedado manuscritos con sus obras. Su hija Alicia Torra ha ido recopilando cada vez más y últimamente han sido editadas. Es el caso de esta Festívola que he grabado que es la única obra propia que Alicia de Larrocha tocaba en sus conciertos. Yo la descubrí mientras buscaba en youtube música, que es algo que suelo hacer mucho, y me topé con un vídeo de Alicia tocando esa pieza. Me encantó y me dije, necesito tocarla. Así llegué a la partitura, que es la transcripción que hizo Carles Marigó a partir de esa grabación. Ella hablaba de su música como de Pecados de juventud, obras que en su mayoría compuso durante una época en la que estuvo más parada, como durante la Guerra Civil. Ella había estudiado composición también, pero sufría acaso el síndrome del impostor, no se sentía con la suficiente autoridad como para llamarse a sí misma compositora.
–En el disco hay también una obra de una compositora extremeña actual, Iluminada Pérez Frutos, que tiene una parte electroacústica, ¿le interesa la música actual?
–Me encanta trabajar con compositores y compositoras con los que conecto. Porque, igual que pasa con la música de otras épocas, no se conecta igual con todo. Y yo necesito tocar la música con la que más conecto y con la que creo que puedo hacer mejor papel como intérprete. Porque al final si uno conecta con la música el papel que va a hacer como intérprete va a ser el mejor. He trabajado a lo largo de mi vida con muchos compositores. En Londres, con Oliver Knussen o Peter Maxwell Davies, que fue un lujazo, formé parte de diferentes ensembles... Y en España he trabajado mucho también con compositoras, como Iluminada o Claudia Montero [compositora argentina afincada en Valencia que murió prematuramente en 2021, y de la que también se incluye una obra en este álbum]. Pero también con Teresa Catalán o Alicia Díaz de la Fuente. Iluminada me mandó varias partituras hace unos años y me encantaron todas. Pero esta era especial por su título, Le Sette Sorelle dal Cielo, ¡las Pléyades! Y además no estaba grabada: para mí fue una alegría hacerlo. La he programado además mucho en concierto. A la gente le encanta. Mis amigos me dicen que recuerda a 2001, la película de Kubrick.
En el siglo actual está volviendo la figura del intérprete-compositor, que fue habitual hasta el siglo XX
–Como en su primer álbum, en este incluye también una pieza propia. ¿Usted también siente el síndrome del impostor?
–Depende. No debería sentirlo porque estudié Composición a la par que piano. Sí que es verdad que ahora estoy más centrada en mi faceta como intérprete, pero sigo componiendo y me encanta de alguna forma poder introducir mis obras en recitales, en cedés. Creo que algo muy positivo del siglo actual es que está volviendo la figura del intérprete-compositor, que fue normal prácticamente hasta el siglo XX.
–¿El orden de las piezas en el CD tiene algún sentido finalista?
–Sí. Es algo que pienso mucho. Muchas veces pongo juntas piezas porque están escritas en tonalidades relacionadas entre sí o que establecen entre sí contrastes que quiero resaltar. Planteo mis recitales y mis discos como un viaje a través de las emociones y por eso le doy muchas vueltas a las relaciones tonales de las piezas, a los tempi, los ritmos, los motivos, los caracteres...
–¿Y esa Fantasía negra de Florence Price como cierre del álbum?
–Esta vez es un viaje interestelar el que planteo, pero nos dirigimos hacia la tierra, también a través de mi obra, que es una oda a Kassia, una de las primeras compositoras de la historia de las que han quedado obras. Y esta Fantasía de Florence Price está basada en un espiritual negro para los tiempos de la cosecha en Estados Unidos, y justo en esos momentos, justo en junio, es cuando en Estados Unidos se dejan de ver las Pléyades en el cielo. De alguna forma mágica quería que esas estrellas que dejan de verse en el cielo pasasen a la tierra. Ese es su sentido.
La ficha
SISTERS OF THE MOON
Hélène de Montgeroult (1764-1836): Estudios 37 y 111 del Cours complet pour l’enseignement du forte-piano
Fanny Hensel (1805-1847): Junio / Septiembre de Das Jahr: 12 Characterstücke
Amy Beach (1867-1944): A Hermit Thrush at Eve / A Hermit Thrush at Morn Op.92 nos. 1 y 2
Nadia Boulanger (1887-1979): Petites pieces pour piano
Alicia de Larrocha (1923-2009): Festívola*
Iluminada Pérez Frutos (1972): Le Sette Sorelle dal Cielo*
Susana Gómez Vázquez (1995): Interludio (Oda a Kassia)*
Claudia Montero (1962-2021): Rondo*
Florence Price (1887-1953): Fantasie Nègre nº1 en mi menor
[* Primera grabación en disco]
Susana Gómez Vázquez, piano
Eudora
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