Con mucho TESÓN

Con la obra teatral ‘Que solo me dejas’, de los autores Antonio Paso (hijo) y Emilio Sáez, el actor y director porteño Manolín Gálvez, junto con todos y cada uno de los componentes del Grupo de Teatro TESÓN / Teatro Solidario, celebran sus primeros treinta años encima de los escenarios andaluces.

Estos actores y actrices que llevan inoculados el veneno del teatro casi desde que vieron la luz, algunos en el tristemente desaparecido Teatro Principal, fenecido por las quemaduras de cuarto grado que le provocaron la avaricia inmobiliaria y la estulticia municipal de la época, y otros, componentes más jóvenes arrimándose a la experiencia y sabiduría de Manolo Albert, Ana Arias y el resto de miembros fundadores del grupo, siguen en la brecha después de los años desprendiendo humanidad a través de su pasión por el teatro.

Pedro Muñoz Seca, los Álvarez Quintero, Ray Cooney, José López Rubio, Miguel Mihura y Darío Fo, entre otros, junto con los arriba citados, son los autores convertidos en cómplices sin saberlo, que han facilitado con sus obras que el Grupo de Teatro TESÓN pueda repartir cultura teatral y solidaridad con los más necesitados ejerciendo de cómicos porque sí, porque les da la gana, porque quieren y porque además de disfrutar con ello son capaces de sacar sonrisas de donde muchas veces tan solo salen lágrimas.

AFA Puerto, Cedown Jerez, Asociación Nueva Bahía, AFA Faro de Chipiona, Asociaciones de Fibromialgia, ANYDES, Madre Coraje, Bolsa de caridad del Dulce Nombre, Asociación de personas con otras capacidades de Rota, ACNUR, y puede que alguna se me quede por el camino, son a donde han ido a parar la recaudaciones de todas y cada una de las representaciones teatrales realizadas de treinta años para acá por el Grupo de Teatro TESÓN / Teatro Solidario.

Desde la sede de la Asociación de Vecinos ‘La Gobernaora’, ubicada en la teatral plaza del también actor y director ya fallecido Paco Teja, estos actores y actrices con mayúsculas, emplean su tiempo interpretando palabras escritas por otros, tras incansables horas de ensayo, con la doble intención de actuar encima de un escenario a la vez que facilitar un poco de calor humano a quienes más lo necesitan.