Estamos en Cuaresma

En su fecha, llueva o diluvie, ayer comenzaba la Cuaresma. Desde ayer, miércoles de ceniza, nuestro Puerto se prepara para la llegada de la Semana Santa y de la Pascua.

Una cuaresma que comienza lluviosa y que daba lugar al comentario de algún supersticioso de que, si llueve el miércoles de ceniza, significa que lloverá en Semana Santa, algo con ninguna base científica.

Con respecto al tiempo y viniendo del año pasado en el que la lluvia fue gran protagonista en los días de la pasada Semana Santa, pienso que hemos aprendido que hay que saborear cada segundo y cada minuto de los días que nos llevarán al Domingo de Ramos.

Disfruta de la intimidad de los templos en los días de Triduos de las hermandades, ya no digo ni de tu hermandad, porque es que aquí, nos sentimos hermanos de todas; porque no hay otra manera de ser cofrade de nuestro Puerto que, sintiéndonos todos hermanos.

Aprovecha la cercanía que te dan los besamanos y besapiés. Esos días son únicos en el año y te dan la posibilidad de tener a tus devociones a la altura de tus ojos.

En este tiempo; búscate en tu interior para orar, para ayudar al prójimo; cosa que también podemos encontrar en algunas hermandades durante todo el año.

En esta Cuaresma del año de la Esperanza; el próximo lunes, si el tiempo lo permite, nos espera a los portuenses, disfrutar del Santísimo Cristo de la Misericordia en el Viacrucis del Consejo Local del Hermandades. Un Señor que, con sus brazos abiertos, da la bienvenida a la Cuaresma Cofrade Portuense.

Paralelo a lo religioso; sí, ¿por qué no? Intenta vivir también la Social-Cuaresma. Esa que te regala los momentos más humanos de nuestras hermandades, de nuestras cuadrillas, de nuestras tertulias y que vienen con los primeros olores a azahar.

Ambas formas de vivirlas van juntas de la mano y son complementarias la una de la otra.

Disfruta de la Cuaresma, la que sabe a torrijas y huele a incienso, la del interior y fuera de los templos. Disfruta de la Cuaresma, que, sin duda, es lo que los cofrades y quien nos quiera acompañar, esperamos un año entero.