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Política Municipal
Cádiz/Les pongo en conocimiento que en el día de hoy he presentado mi renuncia al acta de concejala por el que ostento las competencias delegadas del alcalde en materia de Vivienda, Salud y Servicios Comunes, para que se haga efectivo en el Pleno del 31 de marzo.
Como ya anuncié cuando entré en el equipo de gobierno es mi intención regresar a mi puesto de funcionaria municipal con anterioridad a las elecciones, para que las responsabilidades políticas y las que tengo en mi condición de servidora pública no se interfieran en ningún momento.
Entiendo la política institucional como un acto temporal de servicios a la ciudadanía y a ello me he dedicado con dedicación y perseverancia estos cerca de ocho años.
Ha sido un auténtico honor para mí haber participado en el gobierno municipal, lo que me ha permitido conocer a fondo la ciudad, las instituciones y a multitud de personas. Confío en haber aportado en todas y cada una de las áreas que he tenido la suerte de dirigir y pido disculpas si no he llegado a todas las situaciones que hubiera deseado resolver o si he sido demasiado impaciente o vehemente con aquello que perseguía. He luchado todo lo que he podido.
Hay dos cuestiones que, fruto de mi experiencia, quiero señalar sobre la confrontación política. Una es que, por legítima que sea, no debe ser nunca un obstáculo para la colaboración entre las administraciones en beneficio de una ciudad y, otra, que no debe amparar la infamia y los ataques como los que he tenido que soportar hacia mi persona y hacia miembros de mi familia y excompañeros de trabajo por parte del sector más reaccionario del partido popular, con denuncias incluidas a cinco personas y por supuesto todas desestimadas, que ni me intimidaron ni me restaron un ápice de ilusión pero que no son aceptables en una democracia.
Vaya el agradecimiento a todas las personas que confiaron en mí para poder representarles y también al alcalde y a todo el equipo de gobierno, al personal municipal y de la empresa de vivienda, así como a todas las personas y entidades con las que he trabajado. Gracias por la colaboración prestada y por la labor que realizan. Mi reconocimiento especial a la formación a la que pertenezco, Ganar Cádiz en Común, con quienes he compartido la labor municipal y el movimiento asambleario. Ganar Cádiz, tanto por las personas independientes como por las que proceden de IU, ha sido un ejemplo admirable de trabajo colectivo y de construcción política y social; y espero que perdure y se fortalezca con las nuevas alianzas.
En este tiempo también he comprendido que hay dos modelos de ciudad en el tablero político. Uno que pretende vender la ciudad a la turistificación sin control que eleva los precios y expulsa a su gente, que privatiza la sanidad, que permite la proliferación de las casas de apuestas o que antepone el coche al peatón y a las personas con movilidad reducida. Y el otro, el que compartimos buena parte de la ciudadanía, que es un modelo más acorde con los tiempos, que apuesta por la movilidad, la eficiencia energética, la protección medioambiental y animal o la defensa de lo público. Se ha avanzado mucho, pero queda mucho por hacer y por mejorar. No podemos volver al pasado. Hoy esta ciudad es más inclusiva, sostenible, participativa, feminista y diversa. Necesitamos progreso pero para todas las personas, sean empresarias o sean camareras, que sea compatible con el derecho a la ciudad y con el cuidado del planeta. Lo contrario es un falso progreso por el que se enriquecen unos pocos mientras se perjudica a la población vulnerable y a las generaciones venideras.
Confío en la unidad de las izquierdas para revalidar proyecto en las próximas elecciones pues compartimos este modelo y debemos seguir avanzando en él, más ahora que hemos logrado sanear un ayuntamiento que recibimos intervenido y endeudado. Son muchos los desafíos que las ciudades tienen por delante frente al cambio climático y la preservación de los derechos, por lo que seguiré colaborando de manera activa. Si bien la política no debe ser nunca una profesión, sí es una forma de ser y de vivir de la que ni quiero ni podré desprenderme. Muchas gracias y mucho afecto.
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