La organización de las fiestas en Cádiz: Que no nos pille el toro

El Ayuntamiento de la capital ya ha adjudicado el nuevo alumbrado extraordinario y tramita otra media docena de contratos vinculados con la próxima Navidad y el Carnaval de 2025

La gran nevada y el encendido del alumbrado extraordinario en Cádiz
El alcalde y parte de su equipo, en el encendido de la pasada Navidad. / Lourdes De Vicente

10 de septiembre 2024 - 07:00

El Ayuntamiento de Cádiz no quiere que los plazos jueguen en contra de las próximas grandes fiestas de la ciudad. Con el temor aún latente de gestiones pasadas en las que los eventos se preparaban a última hora y los contratos llegaban sobre la bocina, la maquinaria de la próxima Navidad y del Carnaval de 2025 está más que arrancada, como si el gobierno de Bruno García quisiera evitar a toda costa errores de bulto cometidos en años anteriores por los anteriores gobernantes. 

El alumbrado extraordinario de estas próximas fiestas es un claro ejemplo, habiendo tomado la delantera con la adjudicación ya formalizada a la empresa Iluminaciones Ximénez –tal y como adelantó este periódico– por importe de 3.199.373,10 euros, lo que supone una partida anual de 1.559.686,55 euros.

Con las luces aseguradas, a día de hoy se contabilizan más de media docena de contratos que están en proceso de licitación para tener a punto las principales fiestas que tiene por delante la ciudad.

Uno de los eventos en los que ya trabaja de manera más decidida el Ayuntamiento es la cabalgata de Reyes, para cuya celebración hay en marcha varios procesos de contratación. Ya se conoce el diseño o temática que tendrán las nueve carrozas que circularán por la ciudad el 5 de enero (con personajes como El Grinch, La Bella y la Bestia, Frozen y Los Pitufos, además del Cartero, la Estrella y los tres Reyes Magos). 

A este contrato se suma el del alquiler de los nueve semirremolques que harán las veces de carroza (para los que necesitará el Ayuntamiento 32.670 euros) y de los tractores “aéreo-portuarios de pequeñas dimensiones, con conductor” para tirar de los semirremolques (que necesitarán un gasto máximo de 70.785 euros). Ambas cuestiones han salido a licitación también para la cabalgata de Carnaval, que utilizará, pues, los mismos semirremolques y los mismos tractores.

Además de esto, para la Cabalgata de Reyes ha salido ya a concurso hasta la distribución de los caramelos que se lanzarán al público que la presencie. Un total de 20.000 kilos de caramelos individuales “en envoltorio de doble lazo” sin gluten que supondrán un coste de 70.400 euros (a razón de 3,52 euros por cada kilo de golosinas.

Con el 5 de enero prácticamente resuelto -a falta de que finalicen los plazos de presentación de ofertas y adjudicar cada contrato a la empresa mejor valorada- también ha iniciado con bastante antelación el Consistorio la organización del Carnaval de 2025 (que empezará el 27 de febrero, dentro de más de cinco meses) con contratos como el del montaje del escenario que durante los días de fiesta estará operativo en la plaza de San Antonio, y que cuesta 176.599,50 euros; o con el suministro de serpentinas (hasta 500 cajas de 40 paquetes de 25 unidades cada uno, por importe de 27,24 euros por cada caja) y papelillos (hasta 750 sacos de 5 kilos cada uno, a razón de 18,45 euros cada saco).

A todos estos contratos se une el que también está en fase de recepción de ofertas para el suministro en alquiler de las vallas que se utilizarán en las dos cabalgatas (Reyes y Carnaval) y en otros actos de la delegación de Fiestas. Un total de 86.902,20 euros que tiene previsto emplear el Ayuntamiento para garantizar la seguridad de estos eventos.

En total, el Ayuntamiento tiene actualmente garantizados 2,1 millones de euros para sacar adelante las próximas fiestas de Navidad y Carnaval (ya que el contrato de 3,1 millones de euros del alumbrado extraordinario se firma por dos años, a razón de 1,5 millones anuales). Pero más allá de la cuestión económica, que viene a ser la misma que la de años anteriores –a excepción del alumbrado extraordinario, donde se ha triplicado el gasto–, lo que quiere garantizar el Ayuntamiento es que la organización y desarrollo de las fiestas queden asegurados con suficiente antelación, evitando así fantasmas del pasado reciente.

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