Puerto solidario

Leyendo el periódico encuentro noticias reconfortantes. Será que estos días afloran las buenas intenciones de ciudadanos y colectivos portuenses para tratar de quitarnos de encima el disgusto y el miedo de la dana. Será, tal vez, que la Navidad se aproxima y casi siempre saca lo mejor de cada uno. Lo cierto es que me he sentado demasiado tarde a leer el periódico y me sorprende el tumulto de noticias esperanzadoras. Las necesitamos, ya lo creo.

Resumo:

—El Ayuntamiento destinará casi 300.000 euros en mejorar los centros docentes. Como profe, me llena de alegría.

—El gobierno destinará 1,3 millones para la mejora de un proyecto empresarial en la ciudad. Pienso: proyecto empresarial, trabajo. Oportunidades. Gracias. Ojalá sea cierto.

—Betilo, la asociación constituida hace cinco años para Defensa del Patrimonio Histórico Portuense inaugura una exposición en Hospitalito de autores muy importantes locales llamada: Pintores por el Patrimonio.

—Por la tarde seguirá floreciendo la cultura, esta vez, a través del Dúo Ensueño, que nos deleitarán con un concierto a beneficio de Las Concepcionistas.

—La Flave, recordándonos las recogidas de alimentos en distintos puntos de la ciudad.

—La Academia de Bellas Artes Santa Cecilia, que continúa mejorando sus dependencias gracias al esfuerzo y tiempo de algunos implicados. Y como no va dejar de trabajar por la ciudad, ya está organizando actividades para celebrar el 125 aniversario de su fundación.

— Me parece muy importante que la Concejalía de Bienestar Social y Familias se haya sumado a la campaña que organiza la Asociación de Familias Solidarias para el Desarrollo, implicada en buscar viviendas a los jóvenes que, al cumplir dieciocho años, deben de dejar los centros de menores en los que viven. Ojalá estos muchachos encuentren un hogar que les permita seguir formándose y les augure un futuro digno. No tiene sentido devolverlos a la calle a expensas de la suerte. A la suerte hay que forzarla.

—El martes pasado, entramos las compañeras del taller 'Educando en Solidaridad' en La Gaviota y nos sorprendió la recogida de alimentos con destino Valencia. Me consta que otros centros también están colaborando.

Es la ciudad que necesitamos: la que nos haga mejorar como personas capaces de compartir.