Tímida reacción popular a los desmanes de Trump

Impactados por las noticias de las decisiones que se van tomando en la Casa Blanca, y que afectan a todo el mundo, y con los shows casi diarios en el Despacho Oval, se escapan otras informaciones de gran importancia. Nos centramos en el anuncio de la imposición inmediata de aranceles a las exportaciones, en el enfrentamiento verbal con Zelenski ante las cámaras, o con el presidente francés Macron que corrigió en directo a Donald Trump en el mismísimo Despacho Oval, como un eficaz verificador de datos que desmentía las noticias falsas que daba el presidente norteamericano. Bravo, Macron. O la increíble carta de Jeff Bezos, dueño de Amazon y del prestigioso diario The Washington Post, advirtiendo de la salida del director del medio y del estrangulamiento de la pluralidad tradicional del periódico. Opiniones que deben alinearse con la involución que se está viviendo, o redactores a la calle. Lamentable recorte de la libertad de expresión.

Pero basta ver unas horas de la cadena mundial de noticias CNN en su versión en español para Estados Unidos (la huella del satélite cubre toda América) para conocer al detalle otras informaciones menos difundidas: por ejemplo, las patrullas ciudadanas de voluntarios que protegen a los emigrantes (ilegales o no) perseguidos por la Policía. Según el zar de la frontera, Tom Homan, que dirige el operativo, ya se ha detenido a más de veinte mil inmigrantes; pero seguramente serían muchísimos más sin estas patrullas de voluntarios. Armados con megáfonos, sus integrantes siguen a los coches de policía y avisan al vecindario de que el peligro acecha. Reparten a conductores y viandantes, en los barrios con mayor población hispana, una tarjeta roja con los derechos ciudadanos frente a la intrusión policial, empezando por el no tener obligación de abrir la puerta de su casa a los agentes a menos que acudan con mandato judicial. Son voluntarios que pasan varias horas en esas patrullas, antes o después de acudir a sus trabajos: hay entre ellos maestros, empleados e incluso algún funcionario, especialmente en el sur de California; pero creciendo en otros estados.

Otro reportaje en la CNN muestra la salida de los empleados federales despedidos, formando colas con cajas conteniendo sus pertenencias, que debían ser recogidas en un máximo de 15 minutos. Más informaciones sobre el cierre de agencias de apoyo a la ciudadanía, como la que se ocupaba de reclamar los intereses y comisiones abusivas cobradas por los bancos. Una verdadera degradación de las barreras de protección de la población ante la acción de grandes corporaciones. Y así sucesivamente.

Mientras, en la CNN en inglés se vivió una tensa entrevista al secretario de Estado, Marco Rubio, que criticaba duramente a Zelenski pero sin admitir que echaron literalmente de la Casa Blanca a los ucranianos tras el incidente con Trump. Cualquiera podría vaticinar que, más pronto que tarde, alguno de los multimillonarios tecnológicos que han tomado el poder al tiempo que Donald Trump, presentará una astronómica oferta de compra por ese canal de televisión, y por cualquier otro medio afín, para acallarlo. La tímida pero apreciable reacción popular en Estados Unidos a los desmanes de Trump es retransmitida por la CNN y algunos pocos medios más. Veremos por cuanto tiempo.

Lo que está en juego también es la propia OTAN. Palabras mayores. El posicionamiento ante el incidente Trump-Zelenski muestra una distancia de Europa con Estados Unidos que augura tiempos muy difíciles. Estamos en una nueva era.