yo te digo mi verdad
Manuel Muñoz Fossati
Mejor, como en Macondo
El pinsapar
Puede que lo haya leído, seamos bien pensados, pero no lo ha entendido bien. Que el mejor alcalde es el Rey. Me refiero a Lorena Silvent (PSOE), la alcaldesa de Catarroja. Como quiera que la Casa Real no le informó de la visita de los Reyes, porque se había decidido que fuera algo de sorpresa y sin figurar en ninguna agenda, cuando se enteró y se sobrepuso un poco de su frustración y soberbia, se puso a largar contra don Felipe y doña Leticia. Fijaos con qué términos: ha visitado “la parte más operativa”, tracatrá. Con este remate y adorno: para querer aparentar “una cierta normalidad, que no es real”. La parte más operativa era el mercado, donde toda la gente que había allí más la que fue avisada de la presencia de los Reyes y acudió presurosa, agasajaron y agradecieron a los Reyes y sus hijas, la princesa de Asturias y la infanta Sofía, la visita a uno de los pueblos más castigados de la región valenciana. Lorena Silvent se ha cubierto de gloria y ha mostrado el verdadero tamaño de su estatura como alcaldesa, su vulgaridad y su escasa capacidad de gestión de las emociones. Como si los Reyes hubiera hecho algo contra ella y su gobierno, cuando lo que hicieron fue fundirse con el pueblo de Catarroja, una vez más, expresando su apoyo y solidaridad. Digo que mientras don Felipe y doña Leticia se remangan y se ponen en la cabeza de la manifestación, la alcaldesa de Catarroja se pone en evidencia delante de toda España mostrando su alma pequeña y sus ínfulas insufribles. Es lo que tenemos, una prueba más, políticos impresentables (y me quedo corto). Don Felipe y doña Leticia, junto a sus hijas, siguieron su camino por otras localidades de la devastación con una pausa para comer en la Albufera. Y volvieron a La Zarzuela. La Guardiamarina Leonor de Borbón se embarcará en los próximos días en Cádiz en el Buque Escuela Juan Sebastián Elcano para seguir su formación militar en la Armada y cada uno de los demás estará en sus responsabilidades, que nunca renuncian a ellas, y que no son pocas ni son fáciles (prueba de ello es la señora esta de Catarroja que no ha leído bien la obra de nuestro grandioso Lope de Vega, en el supuesto de que la haya leído). La Navidad pondrá bálsamo también en la herida que le ha producido su idea de lo que los Reyes de España tienen que hacer si otro día deciden ir a su pueblo, en donde ella manda y que no se olvide. Nada de incógnitos, avisados, eh.
También te puede interesar
yo te digo mi verdad
Manuel Muñoz Fossati
Mejor, como en Macondo
Su propio afán
Enrique García-Máiquez
Niño-Dios de esta noche
La aldaba
Carlos Navarro Antolín
Una noche amenazada también por el confort
Gafas de cerca
Tacho Rufino
Niño
Lo último