El pleno aprueba el Plan Municipal frente al cambio climático de Puerto Real

MEDIO AMBIENTE

El diagnóstico apunta como principales impactos climáticos la notable subida de las temperaturas, la escasez de agua, el aumento de las enfermedades transmitidas por plagas y la subida del nivel del mar, entre otros

Algunas de las medidas de adaptación ya se han puesto en marcha, como el estudio sobre la pobreza energética

Un proyecto piloto pretende determinar los niveles y causas de la pobreza energética en Puerto Real

Aprobación del Plan Municipal frente al cambio climático de Puerto Real
Aprobación del Plan Municipal frente al cambio climático de Puerto Real / C.P.

Puerto Real/En el Pleno celebrado ayer jueves, se aprobó el Plan Municipal frente al cambio climático de Puerto Real. Un plan cuya importancia y urgencia quedan de manifiesto a través del apoyo mostrado por parte de casi todos los grupos políticos (Confluencia de Izquierdas para la Gente, Adelante Andalucía, PSOE, AxSí y PP), salvo VOX que votó en contra y la concejala no adscrita, Inmaculada Garrido, que se abstuvo.

Se trata de un documento estratégico basado en los estudios técnicos iniciados en 2021: ‘Inventario de emisiones de gases de efecto invernadero’, por un lado, y el de ‘Riesgos y vulnerabilidades’ frente al cambio climático de Puerto Real, por otro. Con la implicación de un importante número de áreas municipales, a nivel técnico y político y mediado por un proceso participativo serio, de más de 9 meses de duración, se diseñaron las Estrategias de Mitigación y Adaptación que ahora se aprueban.

Ha sido gracias al impulso del Programa Gloclima, de la FAMSI, que ha permitido financiar los últimos trabajos, a la voluntad política y al empuje de la ciudadanía que se aprueba por fin, este documento. El diagnóstico a nivel local apunta como principales impactos climáticos la notable subida de las temperaturas, la escasez de agua, el encarecimiento de los combustibles -y con ellos de la vida en general-, el aumento de las enfermedades transmitidas por plagas o la subida del nivel del mar. A estos impactos debe responderse desde todas las áreas si bien las de urbanismo, derechos sociales, transición ecológica, salud y participación deberán tener un papel más activo.

Algunas de las medidas de adaptación recogidas en él ya se han puesto en marcha, como el estudio sobre la pobreza energética a nivel local, medidas de prevención frente al virus del Nilo, el Plan de Sequías o la instalación de toldos en zonas concurridas de la ciudad.

Otras se irán iniciando en los próximos meses y años, hasta la culminación del plan en 2030. Por ejemplo, medidas variopintas como la redacción de un plan de emergencias, de protección de los centros escolares frente al calor, de conservación de la biodiversidad o de reverdecimiento y adaptación del urbanismo o los sectores económicos, buscando poner la vida en el centro.

Junto a estas propuestas, destacan también las referentes a reducción de emisiones. Establecido que el sector más determinante es el del tráfico y la movilidad, se han aprobado modificaciones al ya existente del Plan de Movilidad, que queda así integrado en el mencionado Plan frente al Cambio Climático. Las nuevas aportaciones no sólo van dirigidas a limitar las emisiones asociadas al tráfico rodado si no que nacen con la pretensión de generar una movilidad alternativa, que realmente priorice a las personas frente al automóvil.

stats