'Borneo Park', una isla de diversión en el centro de la Bahía de Cádiz

Puerto Real/Borneo es territorio de diversión. Un lugar para disfrutar, experimentar, conocer… Un rincón del mundo al que cada vez se acerca más gente y en el que siempre se acierta si se visita. Y esto, que podría ser un reclamo turístico para la que es la tercera mayor isla del mundo, situada en el sudeste asiático a más de 11.000 kilómetros de distancia de la Bahía de Cádiz, es la esencia del proyecto que Miguel (Puerto Real) y Delly (Malasia) emprendieron en Puerto Real hace algo más de un año: ‘Borneo Park’.

Son una de esas parejas que encajarían bien en el perfil de “ciudadanos del mundo”. Gracias a la profesión que ambos compartían cuando se conocieron como auxiliares de vuelo, han recorrido y vivido en lugares como Malasia, Andorra, Inglaterra, Qatar, Abu Dabi, Canarias… Sitios que forman parte del bagaje de quienes decidieron tras la pandemia volver al Puerto Real natal de Miguel, para ver crecer a sus hijos, Kai y Zeyden, de 8 y 5 años.

Cuando regresaron a Cádiz probaron suerte con Bubble Tai, el negocio que montaron en el número 2 de la céntrica calle Ancha de la ciudad de Cádiz, que lleva funcionando ya tres años con mucho acierto. A ello sumaron en mayo del pasado 2023, Borneo Park, en la calle Noruega 39 del polígono ‘El Trocadero’, de Puerto Real.

“Una de las primeras cosas que aprendes como padre es que, aunque te cueste creerlo, los niños tienen más vida social que tú y rara es la semana que no tienen un evento”, dice Miguel Cruz bromeando.

En esas fiestas, entre fotos de recuerdo, cambios de ropa, bolsitas de regalo y miradas al reloj, Miguel y Delly no perdían detalle de los comentarios del resto de padres. “Siempre escuchábamos lo mismo: que no había sitios para celebrar una fiesta de cumpleaños, que todo era lo mismo, que si tenían que salir fuera…”, recuerdan. Así fue como encontró de la necesidad una respuesta que se convertiría en uno de sus principales proyectos.

“Lo hablamos y empezamos a buscar un sitio que encontramos en el polígono El Trocadero. Una nave que reunía todo los que queríamos y que nosotros mismos pintamos y decoramos con la ayuda de un familiar al que se le dan los grafitis mejor que a nosotros. “Por supuesto nuestros hijos fueron conejillos de indias probando todo lo que podía resultar divertido para los pequeños de su edad”.

Así fue como nació ‘Borneo Park’, con el que también han querido rendir un homenaje a los orígenes malayos de Delly. “Tenemos allí hasta un mapa con cosas que se podrían visitar en Borneo y muchas de las especies que habitan en el país, como el Hornbill, que nos ha servido incluso de imagen del parque”. En muy poco tiempo se han convertido en un referente. En un lugar por el que cientos de niños y niñas pasan para celebrar desde las habituales fiestas de cumpleaños hasta graduaciones o reuniones de amigos.

El espacio cuenta con un parque infantil con toboganes, zona de bolas, rocódromo, una pequeña pista de fútbol, canastas de baloncesto y otros atractivos para que cada pequeño encuentre su sitio. “Aquí no se aburre nadie”, dice Miguel orgulloso.

Además, recientemente han ampliado la oferta con la instalación de una pared de escalada vertical que está causando sensación. “A los niños y niñas les encanta treparla, y los padres y madres se quedan tranquilos porque tenemos un novedoso sistema de seguridad con cascos y arneses. Vamos, el mismo sistema que hemos visto hace nada en la escalada de las Olimpiadas de Paris”. La escalada vertical está incluso preparada para que, si los padres y madres se animan, lo prueben.

Como en las celebraciones no todo son juegos, Borneo Park cuenta también con salones privados e independientes, en los que ofrecen distintas opciones adaptadas a las familias. Entre ellas, llevar la comida que deseen y, claro está, su tarta.

En este año que llevan funcionando, Miguel y Delly están muy contentos con los resultados, porque “las familias agradecen poder tener un sitio así”. También llevan muy a gala las excelentes reseñas que suelen dejarles una vez que la fiesta ha terminado.

En todo este tiempo, han abierto sus puertas a jóvenes de campamentos de verano y ahora están planteando una propuesta que lanzarán a los colegios, para que los alumnos prueben también la escalada.

“Queremos ser el parque de la Bahía, y que nos visiten vecinos de Puerto Real, Cádiz, San Fernando, El Puerto o de cualquier lugar que lo deseen, porque estamos en el centro de la Bahía, esperando a todo aquel que lo desee”.