Hartazgo de los sanitarios de la UCI del Hospital de Puerto Real: "Esto no es una dictadura"

Puerto Real/Hace dos semanas, los profesionales sanitarios del Hospital Universitario de Puerto Real protagonizaron una masiva protesta ante las puertas del centro para denunciar, principalmente, los recortes en el sistema y la falta de personal.

Del mismo modo, este martes ha tenido lugar otra protesta en la misma línea, aunque con un matiz importante: por primera vez han sido los profesionales de un servicio los que han tomado la iniciativa y han salido a denunciar el “estado crítico de la UCI”.

Los profesionales de enfermería, TCAEs y celadores de la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Universitario de Puerto Real han denunciado la “delicada situación” en la que se encuentran desde hace ya alrededor de cinco meses, “debido a la mala gestión de la Gerencia de nuestro hospital y su Dirección de Enfermería”. Esto, según dijeron, está provocando una “bajada en la calidad, seguridad y atención a nuestros pacientes y, a su vez. en la salud física y psicológica de cada uno de los trabajadores”.

Han llevado sus protestas a la calle ante el caso omiso de la Dirección Gerencia, que “ha sido informada en numerosas ocasiones sin que hayamos tenido la mínima consideración ni se hayan aportado las medidas necesarias para poner remedio”. El objetivo de la concentración de este martes no ha sido otro que “pelear para que nuestra Unidad de Cuidados Intensivos vuelva a ser aquella en la que se ofrecían cuidados de excelencia al paciente crítico y sus familiares, caracterizados siempre de alta calidad, seguridad y exquisita atención y profesionalidad a nuestros pacientes”.

Han relatado que, desde el cierre de la UCI para ejecutar las obras de ampliación y mejora, se han optado por la división de la unidad en dos ubicaciones distintas (UCI 1 y UCI 2) que constan de 6 camas cada una, atendidas cada una de ellas por 3 enfermeros, dos TCAEs y un celador. Esa situación fue aceptada por la plantilla de la UCI, que entendió que durante las obras debían de asumir ciertas dificultades. Sin embargo, la situación, según denuncian, “ha pasado a ser insostenible”, porque "no se cumple esa rato y continuamente se traslada personal a la Unidad e Reanimación Postquirúrgica (URP) situada otra planta primera, y que se habilita como UCI ciando esta tiene las doce camas ocupadas".

Aseguran que no se respetan las ratios de enfermera y TCAEs por paciente ingresado en la UCI, dejando la unidad con menos profesionales con mucha frecuencia. “Esto supone un agravio comparativo con los compañeros que trabajan en las UCIs de los restantes hospitales gaditanos y andaluces, así como un agravio comparativo para la atención segura y de calidad de los pacientes”.

Denuncian en ese sentido un trato inadecuado por parte de determinados supervisores de guardia hacia el personal de UCI, que “se niegan a darnos por escrito la justificación del traslado del personal a otra unidad, algo que se recoge en la Ley sanitaria, justificando que es una orden directa de la dirección y que no nos podemos negar a acatarla. Esto no es una dictadura”.  

Además, recalcan que en las escasas ocasiones que se ha enviado algún refuerzo a la UCI, era “personal sin experiencia ni conocimiento para el trabajo con el paciente crítico, lo que supone una falta de atención segura y de calidad a nuestros pacientes y una sobrecarga de trabajo”.

Las mareas pedirán a los gerentes y directores médicos de Andalucía que dimitan en bloque

La protesta de este martes ha sido respaldad por distintos sindicatos y por la Marea Blanca gaditana, y las mareas de Puerto Real, El Puerto y La Janda. El portavoz de la Marea Gaditana, Antonio Vergara, celebró que por primera vez sean los profesionales del servicio los que lideren la protesta. “Están obligando a que los profesionales sanitarios hagan mal su trabajo, con lo que eso significa para su propia estabilidad mental”, dijo Vergara. “No hay que olvidar que casi el 40% de los profesionales sanitarios andaluces están en riesgo de baja por salud mental”, añadió.

En este sentido, Vergara adelantó que las Mareas Blancas de Andalucía van a pedirle a todos los gerentes, directores médicos y supervisores de Andalucía que presentan su dimisión en bloque, como demostración de que no son cómplices de la situación actual. “Qué demuestren que son profesionales de la gestión, que quieren que las cosas se hagan bien y que se marchan si no tienen los medios”. Recordó que esa situación ya se dio en la Comunidad de Madrid en 2012, en el nacimiento de las mareas blancas.  “No se pueden acatar órdenes, porque lo dice Sevilla, que significan que los pacientes se ponen en riesgo. Eso es una aberración profesional y humana”, concluyó