Kiko Hernández arremete contra Ana Rosa Quintana de la manera más dura posible

El estreno de Ni que fuéramos, la nueva versión de Sálvame, ha sido de todo menos convencional. Además del despliegue habitual de chismes y confesiones, el programa se ha convertido en el escenario de una sorprendente intervención de Kiko Hernández, quien no escatimó en críticas hacia Ana Rosa Quintana, la dirección de Mediaset y hasta sus excompañeros.

Kiko Hernández, conocido por su lengua afilada y su capacidad para desestabilizar, aprovechó su llamada en directo al programa comandado por María Patiño para dejar claro que su regreso al universo televisivo está en el horizonte. Sin cortapisas ni restricciones, Hernández arremetió contra la nueva directiva de Mediaset y recordó sus años de dedicación al canal.

"Si estuviera yo ahí, no solo iría a la puerta de Mediaset, sino que entraba. Con la seguridad, con la policía y con todo. Y les diría: '¡14 años que os hemos llenado los bolsillos! ¡Catorce!Que nos hemos dejado la vida ahí, que entrábamos los viernes a la una de la tarde y salíamos a las tres de la mañana, para hincharos los bolsillos, ¿y ahora no nos dejáis pasar? ¡Hay que tenerla muy dura!", fueron las palabras más contundentes de Hernández.

Pero la intervención de Hernández no se detuvo ahí. Con la agudeza propia, señaló la aplastante audiencia que logró el estreno de Ni que fuéramos, comparándola con el desempeño de otros programas en la competencia. "Al ritmo que vais de seguidores, os queda muy poquito para ganar a la otra", lanzó, haciendo referencia velada al programa TardeAR de Ana Rosa Quintana, cuyos índices palidecen en comparación con los logros históricos de Sálvame.

La reacción en el plató fue mixta: algunos compañeros no pudieron contener la risa ante las punzantes observaciones de Hernández, mientras que otros, incluida la presentadora, intentaron poner freno a sus comentarios incisivos.

La intervención de Kiko Hernández en el estreno de Ni que fuéramos no solo añadió un toque de picante al programa, sino que también puso de manifiesto las tensiones y rencores latentes entre el equipo de Fabricantes Studio y Mediaset. Con el retorno de Kiko en el horizonte, queda por ver si sus bombazos seguirán siendo un arma temible en el universo del corazón.