Laura Matamoros atraviesa un grave problema de salud: “Tengo miedo a quedarme ciega”

Laura Matamoros, reconocida influencer y colaboradora de la televisión, atraviesa uno de los momentos más difíciles de su vida: la posibilidad de quedarse ciega debido a un glaucoma. En las últimas semanas, la hija de Kiko Matamoros ha notado un deterioro en su visión, algo que inicialmente ignoró por temor al diagnóstico. Sin embargo, finalmente decidió enfrentarse a sus miedos y acudir a una revisión oftalmológica, acompañada de su hermano Diego Matamoros, quien la apoyó emocionalmente en este proceso tan complicado.

La influencer, que acumula más de un millón de seguidores en Instagram, compartió su experiencia con sus fans a través de sus stories, mostrando tanto su vulnerabilidad como su temor a heredar el mismo problema que su padre, diagnosticado también con glaucoma. “Tengo miedo a quedarme ciega”, confesó Laura en una de sus publicaciones, donde explicó los síntomas y el avance de su enfermedad. La joven relató que llevaba tiempo evitando las consultas médicas por miedo a los resultados y al avance de su condición ocular. Con una mezcla de nerviosismo y valentía, Laura dio finalmente el paso para saber la verdad sobre su estado de salud visual.

Diego Matamoros, su hermano y principal apoyo en este momento tan delicado, la acompañó a la clínica oftalmológica, ya que el procedimiento incluía una prueba de dilatación de pupilas que le impedía regresar a casa sola. Esta prueba, esencial para diagnosticar el avance del glaucoma, dejó a Laura en vilo mientras esperaba los resultados que definirían su futuro. La ansiedad de Laura se reflejó en su rostro, pero, como ella misma comentó a sus seguidores, contar con la compañía de su hermano hizo que este proceso fuera más llevadero.

El resultado de la consulta fue un alivio momentáneo para la influencer. Tras las pruebas, Laura pudo comunicar a sus seguidores que su nervio óptico seguía estable, aunque con una leve pérdida de visión. “Gracias a Dios todo sigue en orden”, expresó aliviada, compartiendo la buena noticia en sus redes sociales. Sin embargo, la posibilidad de la ceguera sigue latente, y Laura sabe que deberá realizar controles regulares para mantener su visión bajo control. La joven, consciente de los riesgos a futuro, se muestra dispuesta a enfrentar esta dura batalla que, desafortunadamente, podría cambiarle la vida para siempre.