Tommaso oculta un fuerte secreto que podría romper el corazón de Maica

Maica y Tommaso han protagonizado una de las escenas más comentadas de la última gala de Gran Hermano. El reencuentro entre la murciana y el italiano, quienes se conocieron en Grande Fratello, ha sido emotivo y lleno de sentimientos. Sin embargo, hay algo que el público sabe y que Maica desconoce: Tommaso ha tenido un acercamiento reciente con Maria Vittoria, otra concursante del reality italiano.

Desde que Maica volvió a España, Tommaso no ha dejado de intercambiar muestras de cariño con Maria Vittoria. Según él mismo admitió a las cámaras italianas, en un día soleado y con un ambiente relajado, se dejó llevar y besó a la italiana. Sin tapujos, explicó que todo surgió de manera espontánea. Lo que hace más impactante esta revelación es que, justo después del beso, Maria Vittoria aprovechó para enviar un mensaje aparentemente amistoso a Maica: “Estamos pensando en ti con muchas ganas”.

A pesar de esta situación, Tommaso decidió acudir a la casa de Guadalix de la Sierra para reencontrarse con Maica, quien estaba visiblemente emocionada al verlo entrar. Entre abrazos y sonrisas, Maica le confesó que le había echado mucho de menos, y él, sin mostrar la verdad completa, la acompañó en un tour por la casa de Gran Hermano. Para ella, la llegada de Tommaso fue una señal de que el italiano compartía sus sentimientos. Pero el público sabe que, de momento, Tommaso parece disfrutar del misterio y ha preferido callar sobre su relación con Maria Vittoria, declarando que planea decirle “la verdad” a Maica cuando él lo considere.

En medio de la velada, Jorge Javier Vázquez intentó jugar el papel de intermediario. Desde el pantallón del salón, insistió en que Tommaso le contara a Maica toda la verdad, aunque el italiano logró esquivar la presión con una sonrisa y unos cuantos halagos hacia su compañera. 

Maica, quien había confesado en varias ocasiones que el amor no era una prioridad, parece haber bajado la guardia con Tommaso. Sin embargo, el juego está en su punto álgido. Tommaso ha pasado de confesar en Grande Fratello que sólo la veía como amiga a compartir risas y miradas cómplices con ella.