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Una ola de gripe está golpeando España a pocos días de entrar en la primavera, una época en la que los casos de esta enfermedad suelen ser más bajos. El repunte de casos está afectando a todas las franjas de edades, aunque los menores de 15 años se están viendo especialmente afectados.
La gripe es una enfermedad que para la mayoría de las personas es leve, y la pasan sin necesidad de acudir al médico, aunque si los síntomas se agravan es recomendable acudir a un especialista. Las personas que enferman y que además sufren asma, enfermedades cardíacas, diabetes u obesidad tiene más posibilidades de sufrir complicaciones.
La mayor parte de la población superará los molestos síntomas de la gripe en su casa, con reposo, y en aproximadamente una semana comenzará a dejar la enfermedad atrás.
Tener tos o dolor de garganta y goteo nasal o congestión son algunos de los síntomas más comunes de la gripe, como también el dolor de cabeza y y los dolores musculares.
En muchas ocasiones las personas que sufren esta enfermedad experimentan escalofríos y fatiga. Además, la fiebre también puede hacer acto de presencia, con momentos en los que el termómetro se acerque o incluso pase los 40 grados.
La gripe es una enfermedad que se cura sola, y hoy día no hay medicamentos que erradiquen el virus directamente, aunque sí hay algunos (además de trucos) que alivian sus síntomas y nos harán más llevaderos los días que pasemos enfermos.
El paracetamol, ibuprofeno o la aspirina nos servirán para bajar la fiebre y calmar los dolores musculares y de cabeza, por lo que son los medicamentos más consumidos cuando se está pasando por una gripe.
Los antihistamínicos, más conocidos por ser utilizados contra las alergias, también se pueden utilizar en los procesos gripales, así como los antitusivos, eficaces contra la tos.
En cuanto a los trucos caseros, el primero que hay que mencionar es beber mucha agua, pues una buena hidratación nos ayudará a aliviar los síntomas. Para la irritación de garganta se recomienda hacer gárgaras con agua tibia mezclada con sal, además del clásico remedio que consiste en tomar leche con miel.
Tomar una infusión de jengibre también nos puede ayudar a calmar los síntomas de la gripe, gracias a sus propiedades analgésicas y antibacteriales. Y siguiendo con los líquidos que debemos ingerir sí o sí, hay que mencionar al caldo caliente, que nos servirá contra la tos.
Uno de los puntos más importantes es el descanso, pues nuestro cuerpo lo necesita para curarse y volver a estar al 100%.
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