La Asociación Ornitológica de San Fernando mantiene su prestigio internacional
San Fernando/Hasta 1.484 ejemplares han participado en la XXXVII edición del Concurso de Ornitología de la Asociación Ornitológica de La Isla. Un número, reconoce el tesorero, Francisco Muñoz Godoy, que les "ha roto los esquemas". Lo normal son 800 o 900, pero además rechazaron ampliar el plazo de inscripciones a pesar de las peticiones de distintos interesados. Al éxito del certamen de esta entidad que mantiene su prestigio internacional se han unido estas jornadas de exposición en el San Fernando Plaza que ha atraído a un gran número de visitantes y que sigue abierta hasta el domingo. "Ayer viernes por la mañana, día lectivo y laborable, pensábamos que no iba a haber mucha gente y no veas cómo estaba la sala", cuenta Muñoz.
La entidad isleña ha decidido hacer este año una apuesta por premios diferentes, prescindiendo de los trofeos y optando por productos de ornitología para los criadores. Tal ha sido la cantidad de pájaros apuntado a esta edición, que sobrepasaba las expectativas, que la evaluación de los jueces se tuvo que desarrollar en dos jornadas frente a la intención inicial de hacerla en un día. Al casi millar y medio de ejemplares no se suman los que querían participar procedentes de Italia y Portugal cuyas fronteras (invisibles) están cerradas por la gripe aviar. "Pero han llegado de muchos puntos de España: Asturias, Barcelona, Madrid, Toledo, Extremadura, Valencia y toda Andalucía", detalla.
No es extraña esta participación por el prestigio internacional que tiene la Asociación Ornitológica La Isla. "Aquí hay muchos socios que son campeones del mundo y jueces con medalla de oro por la organización mundial de ornitología. E incluso San Fernando es creadora de razas, como el giboso español o el rizado del sur", defiende.
Como en otras ediciones el Concurso de Ornitología de la asociación isleña ha contado con ejemplares que son campeones de campeones de las distintas gamas que compiten: por ejemplo, de postura lisa, de postura rizada o de gloster (que tiene un monográfico en el certamen)... "Es el trofeo que persiguen los criadores: ser campeón de campeones", reconoce Muñoz Godoy. La aspiración de los campeones es ir ahora a los campeonatos de España y después a las citas mundiales.
"Los que no van se preparan los pájaros para empezar a criar", explica sobre esta afición. "Siempre estamos dentro del aviario. Lo bonito de la ornitología para los criadores es el periodo de cría, porque ves los resultados de tu trabajo, desde que nace hasta que se va haciendo adulto", añade. Se trata de un proceso basado en la selección, y por tanto una cuestión de herencia genética y de fenotipos. "Tú vas buscando lo que quieres conseguir. Hay criadores que les gusta el pájaro más estilizado y otros lo prefieren más rechoncho, dentro siempre del estándar", matiza.
No es fácil, deja claro, por ese tiempo que se le dedica, por el dinero que hay que invertir. Más ahora con las consecuencias de la invasión de Ucrania (el granero de Europa junto con Rusia), que hace que el saco de alpiste haya pasado de algo más de 20 euros al doble. "Hay criadores que por suerte pueden mantener el aviario. Otros, sin embargo, lo dejan porque están peor", admite. También hace daño la gripe aviar porque bloquea la exportación de pájaros o la futura Ley de Bienestar Animal porque impide la venta en páginas web, porque el criador suele cubrir gastos –semillas, vitaminas– con estas operaciones. "Esto un hobby muy caro porque preparas al pájaro para el periodo de cría, de muda o de concurso. Para que el estrés no le afecte, para que esté fuerte para que pueda criar, para que supere el periodo de muda" expone.
Actualmente la Asociación Ornitológica La Isla cuenta con unos 140 socios. "Va como la montaña rusa. A veces baja. A veces sube. Con este concurso que hemos organizado, y por el que hemos recibido muchas felicitaciones de los implicados, podemos captar algunos socios más", espera.
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