Reclaman más de 6,5 millones al Ayuntamiento de San Fernando por dar licencias sin suministro eléctrico en Fadricas II
Fueron concedidas en 2008 para construir 26 naves industriales y un hotel, proyecto que se vino abajo al no tener luz el polígono industrial
La reclamación llega justo después de que el Ayuntamiento se haya visto obligado a abonar dos millones al propietario del tanatorio por un caso similar
San Fernando/La mercantil Promoción de Naves Industriales SL reclama al Ayuntamiento de San Fernando una indemnización de 6.539.507,97 euros por los daños y perjuicios derivados de la nulidad de las licencias de obra que la Gerencia Municipal de Urbanismo concedió en 2008 para edificar en los suelos del polígono industrial de Fadricas II a pesar de que no tenían suministro eléctrico.
La Junta de Gobierno Local ha acordado admitir a trámite la reclamación de responsabilidad patrimonial que el pasado 5 de junio presentó la empresa, lo que supone el inicio del procedimiento administrativo que se encargará de determinar si, efectivamente, corresponde hacer frente a dicha indemnización desde el Consistorio. Claro que el tema -de no mediar acuerdo- podría perfectamente llegar a los tribunales como ha ocurrido recientemente con el caso del tanatorio, en el que después de doce años de pleitos y de unas negociaciones truncadas una sentencia firme ha obligado al Ayuntamiento isleño a pagar dos millones de euros.
De momento, precisa el concejal de Presidencia y Desarrollo Económico, el socialista Conrado Rodríguez, esta otra reclamación que está sobre la mesa -y que es un caso similar al del tanatorio- se encuentra aún en el terreno administrativo, no en el judicial, por lo que el tema aún tiene recorrido. Pero el equipo de gobierno, a la vista de lo ocurrido con el caso del tanatorio, no oculta su preocupación al respecto. La nulidad de las licencias de Fadricas II bien puede también pasar factura a las arcas municipales dentro de unos años. Y a tenor de las cantidades reclamadas puede llegar a suponer un duro golpe para el Consistorio isleño.
"Pagamos la nefasta gestión que se ha hecho en anteriores mandatos", resume el responsable de Presidencia al referirse a estas cuestiones que, por los trámites administrativos y judiciales, se dilatan en el tiempo durante años hasta afectar a mandatos siguientes y a gobiernos diferentes.
En el caso del tanatorio, se refería en exclusiva al extinto Partido Andalucista, que era el que gobernaba en minoría. También estaba en 2008, cuando se concedieron las licencias de Fadricas II, aunque por aquellas fechas era el PP -socio de gobierno de los andalucistas- el que estaba al frente de la desaparecida Gerencia Municipal de Urbanismo.
Concretamente, las licencias anuladas que son objeto de esta nueva reclamación millonaria que hace la mercantil afectada son tres. La primera se concedió para la construcción de un edificio con 12 naves industriales; la segunda, para otro de 14 naves y sótanos; y la tercera, para una nave industrial sin uso definido.
El problema es bien conocido desde hace más de una década. El polígono se construyó sin contar con suministro eléctrico, lo que evidentemente truncó cualquier posibilidad de desarrollo. El problema, de hecho, no se ha conseguido resolver hasta fechas muy recientes, cuando tras un largo proceso se ha conseguido dotar a este espacio destinado a la actividad económica de infraestructura eléctrica. En septiembre de 2018 concluyeron las obras. Aún así, al polígono le cuesta despegar.
La reclamación, en este sentido, se basa en que el Ayuntamiento concedió las licencias de obra sin que el polígono tuviera todos los servicios y, por tanto, sin que se hubiera completado su urbanización.
La mercantil Promoción de Naves Industriales SL lleva desde el año 2013 denunciando su situación. Eso le llevó a solicitar en los Juzgados la nulidad de las tres licencias de obra y ahora, una vez conseguida, a exigir la correspondiente indemnización por daños y perjuicios.
El conflicto atañe tres parcelas de Fadricas II de 3.754, 3.368 y 1.203 metros cuadrados en las que esta empresa tenía previsto 26 naves industriales y, en la más pequeña, un hotel. Todo la operación se vino abajo al no tener suministro eléctrico.
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