El Bosque Navantia comienza a plantarse en el Cerro de San Fernando este lunes

San Fernando/El Bosque Navantia comenzará a plantarse en el Cerro de los Mártires mañana lunes. Después del retraso por la espera de las primeras lluvias y un segundo aplazamiento por todo lo contrario, por las intensas precipitaciones, se inicia este paso de reforestación en San Fernando que cuenta con la financiación de la compañía naval.

Esta iniciativa ecológica parte de un convenio suscrito entre Navantia y el Ayuntamiento isleño, por el que la empresa hace frente a los trabajos de plantación y suministro de los ejemplares y el Consistorio se compromete a su mantenimiento por 40 años. La aportación económica es de 30.000 euros, según las cifras que ofreció la alcaldesa, Patricia Cavada, tras la firma del acuerdo en la que el director de Negocio de Corbetas y Buque de Acción Marítima, José Antonio Rodríguez Poch, representaba a la compañía.

La propuesta permitirá repoblar una zona huérfana de vegetación del Cerro de los Mártires en una extensión de hectárea y media. El resultado será el Bosque Navantia para la absorción de dióxido de carbono (CO2) que se incluirá en el registro de huella de carbono del Ministerio de Transición Ecológica. Será el primer bosque de la provincia, el cuarto de Andalucía, pero el primero urbano. La ciudad cumple, según los datos que maneja el gobierno municipal, con el compromiso de la reducción del 20% que se incluye en el Pacto de Alcaldes. Para 2030 el objetivo es rebajar las emisiones un 40%; y para 2040, llegar a ser una ciudad de carbono neutro, en esta carrera contra el cambio climático. Por eso, el Ayuntamiento cede a Navantia la absorción prevista con este nuevo núcleo verde a fin de compensar las emisiones por su actividad industrial.

La especie decidida

Será gracias a la plantación de algarrobo, la especie escogida finalmente para el Bosque Navantia. Se trata de una especie arbórea de la familia de las fabáceas, originaria de la cuenca del Mediterráneo, de desarrollo lento y que comienza a dar frutos al menos unos siete años después de su plantación. Es un árbol de hoja perenne, tronco irregular y corteza lisa, que alcanza una altura media de 5 a 10 metros, aunque pueden llegar a mayor altura con una extensa copa. De gran rusticidad y resistencia a la sequía, su hoja presenta dos colores: verde oscuro brillante y verde claro mate. Se pondrán 1.500 plantones, para que crezcan a partir de ahora; además de más de 20 árboles de más de 2 metros de altura. Navantia ha recurrido a la empresa Eulen para que se encargue de estos trabajos.

Aunque las labores de colocación se iniciarán mañana lunes, antes se han tenido que ejecutar tareas previas de preparación del terreno. Estas debían esperar a las primeras lluvias de otoño, que se retrasaron sobremanera, por lo que durante semanas desde el equipo de gobierno se descartaba dar una fecha para la plantación, al principio prevista para noviembre. Cuando ya fueron suficientes para desarrollar esa faena de preparación de la tierra y de apertura de zanjas, las fuertes lluvias –de la borrasca Efraín– obligaron a retrasar la actuación para colocar los algarrobos, algo que finalmente se producirá ahora por la tregua que da el tiempo en estas jornadas.