San Fernando cierra 2021 con un superávit de 6,5 millones y un remanente de 16,2 millones de euros

San Fernando/"Venimos hoy a hablar de la buena gestión del Ayuntamiento, que permite mejorar su solvencia financiera". La alcaldesa de San Fernando, Patricia Cavada, destaca los buenos datos con los que la administración local cerró el ejercicio 2021: 6,5 millones de euros de superávit y hasta 16,2 millones de remanente de Tesorería, el doble que en 2020.

"El gobierno lleva trabajando en la liquidación financiera y los balances entre las deudas que tenemos y la que tienen con nosotros, con el objetivo de llegar a deuda cero, independientemente de la deuda viva que es necesaria", defiende sobre una gestión que lleva a que el Consistorio isleño disfrute de una buena salud para realizar inversiones y llevar a cabo nuevos proyectos, un "milagro económico", en sus palabras. Los números de 2021 son consecuencia de "una cuidada planificación", que ha permitido, expone, aumentar el gasto público: con un aumento del coste de los contratos y de las prestaciones de servicios.

El Ayuntamiento de San Fernando dispone de más de 34 millones de fondos líquidos, y tiene poco más de 16 millones de deuda financiera, algo que contrasta, compara Cavada, "con los más de 44 millones" que había cuando entró en su primer gobierno municipal. Eso supone un descenso durante su mandato de cerca del 64% del endeudamiento. La liquidación de 2021 indica un incremento de los ingresos percibidos respecto a 2020: de 82,1 millones de euros se aumentó a 85,5 millones.

Estos fondos líquidos, matiza, tienen una limitación a la hora de su uso, por la normativa económica actual, sobre en qué se invierte y a qué gastos se pueden destinar, incluso impide que se liquide con carácter directo totalmente la deuda. En cuanto al remanente de Tesorería "debe ser invertido en unos plazos cortos: antes de que finalice este año. "Por eso se mete en proyectos ya trabajados", añade. Habrá 9,7 millones de euros para inversiones con una rápida tramitación, y el resto será para reforzar la solvencia y liquidez de las arcas municipales.

La intención del equipo de gobierno es dedicar parte del remanente a proyectos estratégicos de ciudad, como la lucha contra la emergencia climática; infraestructuras y mejoras urbanas o alcantarillado. "En los últimos años con la crisis del covid tuvimos capacidad y pulmón de invertir en ayudas sociales, con gran capacidad económica para las personas más vulnerables y ayudas al sector económico. Ahora tenemos una nueva crisis, con un incremento de los precios, que se traduce en las inversiones y ejecución de obras o en los costes de los servicios que se prestan en la ciudad", apunta la regidora.

La solvencia económica, abunda, permite acudir a convocatorias de fondos europeos con capacidad para asumir la cofinanciación de estos o incluso conseguir más puntos en la baremación por la posibilidad de aportación municipal.