San Fernando muestra la solidaridad de sus entidades sociales en busca de voluntarios
El V Encuentro de Cooperación y Voluntariado permite a más de una veintena de colectivos dar a conocer su actividad a los ciudadanos, en especial a la población más joven
San Fernando/En pequeños grupos avanzan de expositor en expositor y escuchan las explicaciones de las entidades sociales sobre el trabajo que realizan y cómo funcionan. Se conciertan nuevos encuentros en las sedes de los colectivos, se anima a colaborar con sus actividades y su tarea voluntaria, se ofrece el material que venden para recaudar fondos... el V encuentro de Cooperación y Voluntariado vuelve a celebrarse para sensibilizar a la población más joven de San Fernando y despertarle su faceta solidaria.
Los trastornos de la conducta alimentaria no son solo los típicos que se conocen, tienen que ver con la comida pero también más allá. Es el resumen de lo que desde Adab (Asociación para la Defensa contra la Anorexia y la Bulimia) se transmitía a los estudiantes de distintos institutos de San Fernando que han acudido al encuentro sobre cooperación organizado en el centro de congresos. "Conocéis seguramente la anorexia y la bulimia, pero también está la vigorexia, la ortorexia, que es la obsesión por comer todo sano...", añadían. Se trata de la única entidad que trabaja sobre este tema en la provincia.
Junto a su mesa, Madre Coraje daba detalles del origen de la asociación para aclarar que su labor no se centra en el apoyo a las madres. "Se cogió el nombre por una activista de Perú (María Elena Moyano) que fue asesinada por Sendero Luminoso. También se refería a su actividad: la recogida de aceite para hacer jabones, que venden para sacar fondos; y la recogida de ropa. "En San Fernando tenemos contenedores en la población naval de San Carlos, en el aparcamiento de Navantia, en Camposoto y en la Pastora, donde está nuestra sede", explica Pilar de Sobrino. Allí atienden a quienes necesitan ayuda los lunes y los jueves, de 18.00 a 20.00 horas.
Entre Cádiz y La Isla un día normal se recoge unos 1.500 kilos de ropa, cantidad que se incrementa en las fechas de cambio de armario que puede llegar a 4.000 o 5.000 al día. También van a domicilio, aclaran. Esas prendas que recolectan se separan entre ropa de abrigo, etiquetada y de hogar. Parte se manda a Perú -uno de los países donde tienen proyectos-, y otra se queda en España para el turno de ropería que tienen en Cádiz o para las necesidades de Cáritas, y cualquier otra ong que necesite su ayuda. Una parte se reserva para las tiendas solidarias, dos en Cádiz (García Carrera, 39 y Valverde, 9). También sacan fondos de la venta al peso del resto de prendas que se usan para el reciclaje, para la reutilización textil. Ese dinero lo destinan a los proyectos de Perú, Mozambique y España.
Frente a ellos, sobre el expositor que ocupan dos voluntarias de Madre Teresa de Calcula se observan bolsos de tela o delantales. Son algunas de las piezas elaboradas en sus talleres, en los que participan mujeres dos días a la semana a cambio de la compra de productos frescos. El dinero lo recaudan en su mercadillo solidario que abren los martes y los miércoles en la calle San Rafael, 46. Allí venden las manualidades y las confecciones que hacen hasta con restos de telas que les donan, también la ropa donada que reciben. Otra se expone en el ropero benéfico que también tienen.
Cruz Roja, Manos Unidas, Asociación Española contra el Cáncer (AECC), Alcer Bahía Gaditana (ayuda a enfermos renales), Asociación Comarcal Unión de Paralíticos (Upace), Asociación de Familia de Enfermos de Alzheimer (Afa Vitae), Asociación de Familiares y Enfermos de Epilepsia (Afede), Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía (APDHA), Asociación Provincial de Familiares de Personas con Autismo (Autismo Cádiz), Asamblea de Cooperación por la Paz (ACPP), Fundación Prolibertas, Asociación Isleña de Fibromialgia y Fatiga Crónica (AIFI), Asociación Personas sin hogar con derechos (Pesho-de), y Asociación Asperger TEA Cádiz son otras entidades que también explicaban a los asistentes su labor.
Como la Asociación de Familiares y Enfermos Mentales (Afemen) que advertía de los mitos existentes sobre las personas con problemas mentales y los prejuicios. Por eso ofrecía a los responsables de los grupos de estudiantes la posibilidad de realizar alguna actividad en la sede de la calle San Bruno: una visita, un taller conjunto o una dinámica de grupo.
Desde el gobierno, la concejala de Civismo Cooperación, Mar Suárez, que se acercaba al encuentro junto a la concejala de Políticas Sociales, Virginia Barrera, se destaca que con esta jornada se cumplen los objetivos "de dar visibilidad y poner en conocimiento de la ciudadanía el papel fundamental que realizan estas entidades en la sociedad y la gran labor que llevan a cabo". Al mismo tiempo, añade, "estas asociaciones pueden hacer nuevos socios y personas voluntarias. El día de hoy también les sirve para estrechar lazos entre ellas, compartir información muy útil para su día a día y conocer la extensa red de recursos que hay en nuestro municipio gracias a ellas".
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