La barriada Bazán encara al fin su rehabilitación tras más de una década a la espera

San Fernando/Corría el año 2007 cuando por primera vez se empezó a hablar de la rehabilitación de las viviendas de la barriada Bazán con cargo a los programas que desarrollaba la Junta de Andalucía, así que no resulta extraño que algunos vecinos todavía tengan sus dudas y se muestren escépticos ante la subvención de 3,7 millones de euros de la ITI (Iniciativa Territorial Integrada) que dará cobertura a la puesta a punto de los bloques y solventará las carencias estructurales que arrastran estos edificios desde hace décadas.

"¿Pero de verdad se va a hacer?", preguntan en la sede de la asociación de vecinos de la barriada sin terminar de creerse lo que desde hace un par de años viene diciendo la prensa, el Ayuntamiento, la Junta de Andalucía... La entidad vecinal que preside José María Santos Bonet se ha convertido en una herramienta clave para coordinarse con las administraciones y con la Empresa de Suelo Isleña (Esisa) para organizar a los vecinos, facilitarles información acerca de las gestiones y recabar documentación para acceder a estas ayudas.

En ello andan desde que en 2018 la Junta anunciara su inclusión en esta orden de subvenciones de la ITI que permitirá emplear una importante cuantía de fondos públicos para costear la rehabilitación de viviendas en barriadas catalogadas como vulnerables. Este miércoles al fin se publicaron en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA) estas subvencionesBoletín Oficial de la Junta de Andalucía que han estado esperando durante más de una década. Ahora los vecinos dispondrán hasta el 12 de noviembre para solicitar las ayudas económicas.

"Sabíamos que el anuncio de las subvenciones estaba ya al caer", afirma satisfecho Santos Bonet. "Ahora nos toca el papeleo".

Hoy, explica el dirigente vecinal, tienen previsto reunirse con Esisa para avanzar con los trámites. Lo primero –dice– será elaborar los informes técnicos de los 15 bloques entre los que se reparten las más de 700 viviendas de la barriada. Para ello se quiere contar con el Colegio de Arquitectos de Cádiz. Es el próximo paso a dar. "Esos informes forman parte de la documentación técnica que hay que presentar para poder acceder a las ayudas".

Queda trabajo por hacer aunque también hay bastante ya avanzado. Sobre todo en lo que se refiere a la puesta al día de las diferentes comunidades de propietarios –un tema que ha costado especialmente en la barriada– y a la creación de las mancomunidades, que agrupan a todos los propietarios de un bloque para facilitar la gestión de las subvenciones con la Junta."Ya hay 10 mancomunidades de propietarios creadas, que son 10 bloques. Serán los primeros en solicitar las ayudas", explica Santos Bonet.

La asociación de vecinos trabaja el tema de las ayudas con Esisa y con la Junta. "Nos van marcando la pauta, indicándonos los pasos que tenemos que dar”, explica al hablar de los trámites y de las gestiones que están en marcha. “Lo primero ahora mismo son los informes técnicos", insiste.

Si todo marcha según el calendario previsto, a mediados de 2021 podrían dar comienzo estas actuaciones. La idea –explica– es intervenir con estos 3,7 millones de euros de manera uniforme en los bloques para solventar sus carencias estructurales, la deficiencias de las cubiertas, los problemas de estanqueidad que presentan esta barriada con más de 50 años de antigüedad. Eso sí, advierte, "tendrá que haber una segunda parte de estas ayudas para llegar adonde ahora no se alcance".

La de la ITI no es la única inversión que está en marcha en esta barriada de San Fernando, donde desde hace meses también se está llevando a cabo un trabajo más social con el Plan Local de Intervención en Zonas Desfavorecidas que se desarrolla dentro del Marco de la Estrategia Regional Andaluza para la Cohesión y la Inclusión Social (ERACIS).

Y entre las actuaciones pendientes de cara al futuro se incluye también la renovación integral de la red de alcantarillado que se incluye entre las inversiones a ejecutar con la prórroga del servicio de agua que se acordó el año pasado, que se calcula que rondará los 4 millones de euros. Otra de las carencias cuyo arreglo demandan los vecinos desde hace décadas.