Un colegio con conciencia ecológica

El colegio San Ignacio izará con orgullo dentro de unos días una Bandera Verde que simbolizará su compromiso con la educación ambiental, con el respeto y la protección del entorno natural, con esa sensibilización del alumnado que luego se hace extensible también a las familias, a la comunidad educativa, al histórico barrio en el que está enclavado el centro.

El colegio ha pasado con éxito la auditoría externa que ha llevado a cabo la Asociación de Educación Ambiental y del Consumidor (ADEAC-FEE) y ha sido distinguido con la Bandera Verde que concede esta entidad, la misma que de cara al verano promueve la concesión de las banderas azules para las mejores playas españolas. De hecho, ambos reconocimientos -cada uno en su respectivo ámbito- se equiparan.

Para el centro, que lleva años trabajando en proyectos ambientales con los niños, la concesión de la Bandera Verde se ha convertido en la mejor distinción que podía recibir el centro. "Llevamos desde 2005 trabajando el proyecto de la ecoescuela y somos el único colegio de San Fernando que pertenece a la Red Andaluza de Ecoescuelas", apunta su director, José Luis Romero Vázquez. La Bandera Verde que concede la ADEAC -explica- viene a reconocer esa buenas prácticas continuadas en educación ambiental y valores, ese compromiso adquirido que se ha ido desarrollando a lo largo del tiempo conforme a un programa elaborado y trabajado a través de varios proyectos: Qué bien huele mi huerto, el Safari de cacas perrunas que se lleva a cabo por el barrio o Mi colegio salinero, que rescata oficios desaparecidos y ayuda a los alumnos a conocer la realidad de la historia de su ciudad. Incluso han trabajado con propuestas de mejora para el entorno, como por ejemplo para la plaza de las Esculturas, muy deteriorada hasta su reciente remodelación. "Propusimos al Ayuntamiento un proyecto para plantar nuestro huerto de aromáticas en este espacio", apunta el director del centro.

Son trabajos que avalan el compromiso con el medio de este colegio isleño, que se incluye también entre las entidades adheridas a la Estrategia Andaluza de Educación Ambiental. "Todos los centros trabajan el tema del medio ambiente, pero nosotros somos una ecoescuela. Desarrollamos un programa especial que trabajamos desde que el niño entra en el colegio con tres años hasta que pasa a Secundaria", explica José Luis Romero. Hay un comité ambiental que decide y supervisa los proyectos que se llevan a cabo, se trabaja con la asociación de vecinos, con expertos del Jardín Botánico, con salineros jubilados... "Dentro de la autonomía pedagógica del centro trabajamos todos esos valores con los niños desde que entran en el colegio y eso abre sus mentes, los sensibiliza, les enseña a trabajar en equipo, a ser mejores vecinos y ciudadanos", sostiene.

Es la filosofía de este centro que este fin de semana participa también en el encuentro de ecoescuelas que se está llevando a cabo en la comunidad de Madrid y en el que presentarán sus proyectos ecológicos. Los alumnos Juan José Montes González (3º Educación Primaria) y Mateo Moreno Castaño (4º Educación Primaria), acompañados por dos profesores del centro, serán los encargados de las ponencias.