El colegio San Ignacio prevé reactivar el servicio de comedor durante el primer trimestre de 2025
Los módulos prefabricados para Primaria esperan desmontados en Málaga su traslado al colegio de San Fernando
El colegio San Ignacio marcha para protestar por las condiciones del centro
San Fernando/La comunidad educativa del colegio San Ignacio ha adelantado que la Delegación Provincial de Educación le ha confirmado que la redacción del proyecto para habilitar un office en el único edifico en uso del centro se encuentra en un estado muy avanzado. Esta actuación marcará el esperado regreso del servicio del comedor al CEIP San Ignacio. Hay que recordar que desde que el Ayuntamiento declarase en ruina el edificio principal el pasado mes de enero, donde se encontraba el antiguo office, los alumnos han tenido que desplazarse cada día al cercano colegio Quintanilla para disfrutar del servicio de comedor. Una decisión que nunca fue del agrado de las familias, ya que los desplazamientos diarios implicaban nuevos riesgos para los escolares a causa del tránsito rodado o en caso de lluvias o condiciones meteorológicas adversas.
La habilitación de este office, que ocupará unos antiguos aseos, será posible gracias a la puesta a punto de la instalación eléctrica que realizó el gobierno local el pasado verano en base al diagnóstico de la OCA (Organismo de Control Autorizado para las instalaciones de baja tensión).
Las previsiones de la comunidad educativa pasan por reactivar el servicio de comedor durante el primer trimestre de 2025. Aunque madres, padres y docentes insisten en que ésta es una solución provisional y que el futuro del colegio pasa forzosamente por la ampliación del centro, ya que sólo así se recuperarían los muchos equipamientos y servicios que se perdieron cuando se cerró el edificio principal tras su declaración en ruina. De hecho, la propia Agencia Pública Andaluza de Educación (APAE) incluyó la ampliación el pasado mes de abril en su plan de inversiones con un coste estimado de dos millones de euros. Si bien nada nuevo se sabe desde entonces. La comunidad educativa indica que en una inminente reunión con la administración autonómica se abordará la ampliación entre otros temas.
Por otra parte, al colegio se le ha hecho saber que los módulos prefabricados que tendrían que haber albergado a cuatro clases de Primaria del centro desde inicio del presente curso infantil ya se encuentran desmontados y esperando su traslado desde Málaga. Unos equipamientos que llegarán con un considerable retraso tras haberse ya completado en San Ignacio los trabajos previos a la instalación y para dotar de suministro eléctrico, agua y telecomunicaciones a estos módulos portátiles. Además, se dio el caso que hubo que solventar una serie de deficiencias en el proyecto para la instalación y que hasta mediados de octubre no se obtuvo la pertinente licencia de obras.
En cualquier caso, los ánimos de la comunidad educativa siguen caldeados. Sin ir más lejos, numeroso padres, madres y alumnos salieron a la calle el pasado 17 de octubre, tras producirse unas filtraciones por lluvia en el centro, para reivindicar a las administraciones local y autonómica que cumpliesen con sus responsabilidades. Lo hicieron pancarta en mano y durante una marcha que partió del centro y concluyó en el propio Ayuntamiento.
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