Y el mundo fue un concierto de Viva Suecia en San Fernando

Hay veces que Parar la Tierra es la única e insalvable solución para que los problemas dejen de girar. Esta opción no es plausible en la vida real pero sí cuando hay unos cantantes haciendo El Bien. Por mucho que ellos mismos prediquen que no hay que hacerles caso. La verdad es que sí es importante lo que dicen, mandatorio, que nadie se olvide que cuando canta Viva Suecia la única salida es perderse en sus riffs y certeros estribillos.

La espera se hizo larga en Bahía Sound para reencontrarse con Viva Suecia. Esta banda murciana se reencontraba con San Fernando después de su paso en el verano de 2020, cuando se escucharon sus adaptaciones en acústico de algunos temas que ayer hicieron volar. Así eran aquellos tiempos. Ayer, desde luego, no había lugar para la tregua. El mundo era un concierto de Viva Suecia en el que se podía intuir Qué Querías Ser de Mayor.

Casi como en una misa, como viene siendo habitual en esta gira, aparecían estos murcianos con sus vinos en alto mientras avanzaba aquella melodía advirtiendo que, lamentablemente, No hemos aprendido nada. Cuando Rafa introduce esa frase por primera vez, ya hay brazos en alto esperando lo inevitable, el salto de todo el indie. Y sí, rompe el hit con el que Viva Suecia se presentaba para asaltar la Isla.

El concierto giró en torno a dos conceptos que la banda ha trabajado en sus dos últimos discos, la fe y el amor. Y no, no son precisamente católicos. A Viva Suecia se va a creer de verdad en el de al lado, ese amigo o pareja que siempre aguanta lo que le echen. Porque nadie tiene claro A dónde ir, eso es una realidad, pero en esos segundos con Hablar de Nada es suficiente.

En una noche calurosa donde apenas corría viento, el público hacía tiempo que había decidido entregarse al bochorno veraniego. Un contrato social con aquellos murcianos que a guitarrazo limpio avanzaban en uno de los mejores conciertos del escenario de Bahía Sound.

A pesar de todo, había una sospecha en el ambiente, cierto deseo que no iba a enturbiar ni mucho menos el éxito de Viva Suecia pero que sí que podía reforzarles. Entonces, Rafa Val anunciaba que había un amigo por venir, que justo un rato antes había estado lanzando himnos a una tal Lady Madrid. Y sí, apareció Leiva para cantar con los murcianos un Justo Cuando El Mundo Apriete impecable, de estudio. Definitivamente, el mundo era un concierto de Viva Suecia.

El Rey Desnudo se presentó minutos después para destapar fobias, filias y todo aquello que reconcome por dentro. Un tema más que necesario para dejar que el cuerpo se libere y que el amor sea de la clase que sea. En ese momento, aprovechó el grupo para un breve parón mientras amenizaba la fiesta Esdras, el saxofonista que han incorporado este año. Un guiño de la banda a su querido Bruce Springsteen.

Con el recinto entregado volvieron para hacer El Bien y dar Lo Que Te Mereces. Los papelillos corrían de vez en cuando por un cielo isleño que ya se había entregado a ese magnético indie rock. Ya solo quedaba un final anunciado donde todo fueron risas, botes y amar Todo Lo Que Importa.